Luego de que la exministra de Seguridad, Patricia Bullrich, instalara el rumor infundado -a días de las elecciónes de que “la Argentina le prestó más de 9 millones de vacunas a países amigos”, entre los que se mencionó a Cuba, y promoviera la difusión de una nueva fake news, desde el Gobierno nacional emitieron un comunicado en el que se detalla la cantidad y tipos de insumos médicos donados a la isla. 

“Ante la información falsa que está circulando acerca del envío de 9 millones de vacunas a Cuba en una avión de la Fuerza Aérea Argentina, adjuntamos el manifiesto de carga que detalla los insumos médicos donados por nuestro país”, reza el mensaje que Cancillería Argentina difundidó a través de Twitter.

En el documento que acompaña el texto se puede leer los materiales que formaron parte del envío argentino: 517.600 jeringas descartables; 31.000 agujas descartables; 10.000 barbijos N95; 10.000 barbijos quirúrgicos; 1.000 pantallas protectoras faciales + 1 placa de repuesto; 5.000 guantes de nitrilo talle M; 5.000 guantes de nitrilo talle L; 2.000 camisolines descartables tela sms 45grs con puño elástico; 10.000 viales de 1,5 ML, 10.000 viales ded 0,2 ML; 3.366 tips (puntas) con filtro estéril 10 UL LIBRE Dnasa y Rnasa; 3360 tips (puntas) con filtro estéril 100 UL LIBRE Dnasa y Rnasa; y 3.360 tips (puntas) con filtro estéril 200 UL LIBRE Dnasa y Rnasa”.

De este modo, quedó en evidencia una nueva mentira de la presidenta del PRO. Como sucedió en otras oportunidades, Bullrich asistió a una entrevista en el canal macrista, La Nación+, y sostuvo que “hay nueve millones de dosis que no se sabe dónde están. Algunos dicen (sic) que no están en la Argentina. No sé. Es un tema para investigar”.

Y agregó: “Algunos dicen que no están en la Argentina. Que se las prestamos a alguien. No quiero confirmar una información que todavía no la tengo. Pero dicen que se las prestamos a uno de esos países de los que somos amigos.

“Cuba, Venezuela, Bolivia. Es para chequearlo, eh”, remataron los periodistas que estaban en la mesa, sin repreguntar nada. A partir de ese momento, la información comenzó a circular en las redes sociales y otros medios se hicieron eco de las afirmaciones que la exministra de Seguridad lanzó sin la menor evidencia.