La Justicia ratificó y dejó firme en segunda instancia las condenas a los policías asesinos y a los policías encubridores de los crímenes de David Campos y Emanuel Medina, muertos al término de una cacería de patrulleros, el 23 de junio de 2017, en Callao al 5800. En total, son 17 los y las policías condenados que apelaron en vano. Dos de estos, a prisión perpetua, porque abrieron fuego a mansalva contra las dos víctimas, desarmadas adentro de su auto. En tanto, el fallo de Cámara absolvió a dos mujeres policías que habían roto el pacto de silencio inicial y cuyos testimonios permitieron a las partes querellantes y al fiscal construir la acusación y comprobar que el caso era otro más del gatillo fácil de la Policía de la Provincia de Santa Fe.
El tribunal formado por Bibiana Alonso, Carina Lurati y Alfredo Ivaldi Artacho le pusieron punto final al juicio por uno de los crímenes policiales más brutales de la historia local. Aquella mañana, los amigos Campos y Medina volvían de una noche que se hizo día por las calles de Saladillo. Tuvieron el mal tino de eludir un control de la Policía Motorizada, y pronto tuvieron un enjambre de patrullas tras de sí. Nunca se sabrá cómo ni porqué siguieron escapando, corrieron toda la avenida Circunvalación hasta Ovidio Lagos, volvieron a entrar a la ciudad y terminaron estrellando el Volkswagen Fox contra un árbol. Entre los policías que fueron llegando, Alejandro Bustos y Leonel Mendoza abrieron fuego a mansalva. Medina y Campos no llegaron ni a bajar del auto, murieron en sus butacas, acribillados por una docena de impactos. Estaban desarmados.
Lo que siguió fue un festival de complicidades, adulteración de actas, de elementos de prueba, silencio corporativo y mentiras. Porque la versión oficial que pretendió la Policía fue la de un enfrentamiento armado, con tiroteo iniciado por los fugitivos.
La acusación del fiscal Adrián Spelta y la actitud constante de las familias y allegados a las víctimas por buscar justicia derribaron el encubrimiento policial. El caso se ventiló en juicio oral a finales de 2020, y terminó el 13 de noviembre con las condenas a prisión perpetua para Bustos y Mendoza, y al resto penas de entre 1 y 7 años de cárcel.
Algunos acusados apelaron el fallo ante la Cámara, que ayer resolvió ratificar en general la sentencia del primer tribunal. Bustos y Mendoza, como autores de "homicidio calificado por abuso de función como integrantes de fuerzas de seguridad". Además, le añadieron responsabilidad en el delito de "falsedad ideológica de documento público", por lo que consolidaron su condena a prisión perpetua.
Al policía Marcelo Escalante le confirmaron abuso de armas, le revocaron encubrimiento y condenaron por falsedad ideológica. Sigue con la pena de 7 años de prisión.
Un grupo de policías que había sido condenado por encubrimiento a 3 años de reclusión recibió la confirmación de esa pena y además se le agregó otro delito, falsedad ideológica de documento público. Se trata de Paola Cano, Fernando Varela, Aldo Benítez, Leandro Cardozo, Claudio Canclini, Alejandro Bolaños, Alexis Tanneur, Walter Ocampo, Germán Mareco, María de los Ángeles Ramírez y Daniela Abraham. Siguen con la misma pena.
Al policía Hugo Baroni también le pasó lo mismo ante el tribunal de apelación, pero su condena aumentó de 5 años en primera instancia a 7 años de prisión ahora. Otros dos agentes, Rosa D'Angelo y Pablo García, salieron confirmados como encubridores. También, 3 años de cárcel para estos.
Roxana Ramírez y Jésica Lezcano son las agentes policiales que se vieron presionadas a participar de la cadena de encubrimiento. Habían sido penadas a 1 año de prisión de ejecución condicional por encubrimiento. Pero como rompieron ese pacto de silencio y colaboraron con la investigación, ahora el tribunal las absolvió de culpa y cargo.
"Estamos muy contentos por el trozo de justicia que reciben las familias de Ema y David. Agradezco al grupo de colegas que trabajaron en la causa desde el inicio, también a la fiscalía que tuvo un trabajo impecable, y más que nada a mis compas querellantes –en las instancias de debate– Marcia Lopez Martín y Federico Garat", celebró en Facebook uno de los abogados de la querella, Santiago Bereciartúa. Y le respondió Eduardo Campos, el hermano de David: "Gracias. No saben el peso de la mochila que acabo de soltar", escribió al enterarse de la confirmación de la sentencia.