Los cuatro candidatos con más chances de quedarse con tres de las siete bancas que tiene la provincia en la Cámara de Diputados de la Nación, y que se renuevan este año, hablaron con Salta/12 sobre cómo redirigirán sus campañas para las generales del 14 de noviembre. Unos, apuntando al interior y al voto útil; otros,intentando convencer al electorado sobre su proclamada “independencia”. Mientras que el Frente de Todos buscará crecer en Capital y sostener lo conseguido en el resto de la provincia.
El candidato en primer término del Frente de Todos Emiliano Estrada aseguró que seguirán manteniendo el mismo formato de campaña que en las PASO pero con más tiempo, “lo que nos va a permitir tener visitas más pausadas en cada lugar”. Y añadió que en la primera etapa privilegiaron encuentros con dirigentes, emprendimientos productivos y empresarios, mientras que en esta instancia se centrarán en “reuniones con la gente y escuchar sus problemáticas”.
Para Estrada, es hora de pasar de una agenda marcada por un vínculo con referentes y dirigentes, consecuencia del poco tiempo que tuvieron para realizar el recorrido, a una de encuentros cara a cara con el votante de a pie: “Ayer estuve en la Feria de Solidaridad, recién salgo de un taller de construcción de juegos para niños que dictan maestras jardineras, y me estoy yendo a una fiesta de los estudiantes que hay en Güemes”, detalló.
Asimismo, insistió en que seguirán pregonando que tienen “los candidatos más formados y con más propuestas para Salta”, y que por eso son la mejor lista, “independientemente del preconcepto que tenga el votante en términos de frente o partido”. Y subrayó que lograron penetrar en muchos sectores que son adversos al Frente de Todos gracias a que escucharon sus ideas y porque para él, esta elección “tiene mucho más que ver con las listas y cómo están conformadas que con los espacios que integran”.
El candidato a diputado nacional explicó que no se puede intentar sumar linealmente los votos de cada alianza, “porque ya hubo sorpresas”, como la de Andrés Zottos en 2017, en donde en las internas su frente obtuvo alrededor del 38% “y luego en la general sacó 23 puntos”. Y recordó que la lista del candidato de Unidos por Salta, Guillermo Durand Cornejo, logró más votos que la de Carlos Zapata en Juntos por el Cambio+, “y todo el mundo da como si Zapata hubiese sacado la totalidad de su frente”, lo que consideró un error.
En ese sentido, resaltó que su lista alcanzó los 120.000 votos, “no 172.000, y voy a trabajar para poder sumar esos 55.000 votantes de Jorge Guaymás y seguir sumando gente que no fue a votar”. Para eso ya habló con quien fue su contrincante en las primarias y hoy integra la lista en tercer término, pero negó haber mantenido algún encuentro con el candidato del Partido Felicidad, Tane Da Souza Correa, aunque no descartó algún intento de arribar a un acuerdo al reconocer que no sería lo mejor llegar al 14 de noviembre y dispersar el voto dentro del mismo espacio que acompaña la gestión nacional.
“No tenemos que ponernos de acuerdo en muchas más cosas, acá está en debate si le dejamos el camino a la oposición que no quiere construir o si acompañamos al Frente de Todos y lo dejamos gobernar”, sostuvo.
En cuanto a la performance obtenida en Capital, aceptó que deben mejorar, pero recalcó que pese a la adversidad, perdieron solo por 2.000 votos, con lo que se ilusiona pensando en mejorar la instalación de su imagen, “yo no era un candidato muy conocido, y en este tiempo, si llegamos con nuestra propuesta sobre todo a los sectores medios y productivos, podremos crecer más”, se animó.
Chances intactas
A pesar de que si se suman los votos por frente, Unidos por Salta quedó en tercer lugar y lejos de aspirar a una banca, Guillermo Durand Cornejo no se amilana a la hora de pensar que aún puede dar batalla creciendo sobre todo en el interior provincial. Para eso, contó a este medio que en estos días comenzará a visitar los departamentos más alejados “que fueron imposibles recorrer en la campaña anterior” debido a los plazos. En las PASO Durand Cornejo obtuvo un segundo puesto como candidato individual.
El legislador provincial afirmó que seguirá con su método y fórmula de campaña, consistente en no hacer mención a ninguno de los otros candidatos “cosa que sí se hace permanentemente conmigo”, dijo entre risas. “Parece que no se les cae una idea y lo único que se les ocurre es criticarme a mí”, añadió. Y recordó que hace cuatro años, cuando era candidato a senador por la capital, perdió por 17 puntos en las PASO, y en la definitiva ganó por 22, con lo que “queda demostrado que pueden darse cosas totalmente alocadas”.
El candidato criticó las PASO, “porque no le cambian la vida a nadie y ni siquiera hacen falta, porque las elecciones se deben dar en el seno de cada partido y no de esta manera”. Con respecto a sus resultados, reconoció que debe hacer la lectura que hizo la gente “y su enojo general”. Pero intuye que para las Generales “lo van a pensar de verdad porque saben que es definitivo”.
Llamativamente, a pesar de ser el delfín del gobernador Gustavo Sáenz, denunció que hubo funcionarios del gobierno que apretaron a intendentes para que no apoyen a su lista, “ese tipo de cosas son detestables, vergonzosas y pensé que ya no existían”, manifestó.
En cuanto a uno de los ejes de su campaña, contó que intentará cambiar la Ley Federal de Coparticipación, “y poner un control sobre los famosos ATN (Fondo de Aportes del Tesoro Nacional a las provincias), que arrodillan a intendentes y gobernadores”.
A la caza del “voto útil”
En tanto, el candidato ganador en Juntos por el Cambio+, Carlos Zapata, aseguró que cuenta con el apoyo del PRO y de Inés Liendo, que lo acompañará en segundo término, “no es muy difícil de congeniar y avanzar con los ejes de campaña, porque en las PASO tocamos los mismos temas”, contó. Y aunque no muy seguro, resaltó que espera sumar también el respaldo de Héctor Chibán y Nicolás Avellaneda, “acá hay que poner en claro que no es el olmedismo el candidato, sino Juntos por el Cambio, y todos firmamos en un Frente”. “Yo no me voy a mover ni un centímetro de este espacio”, afirmó.
El diputado provincial expresó que seguirán insistiendo con algunas propuestas ligadas a la reducción de presión fiscal, la recuperación del trabajo “sosteniendo la matriz productiva empresaria”, y haciendo crecer la obra pública.
Pero sobre todo, se sinceró al resaltar que apuntarán a aquellos votantes de las listas que quedaron terceras y cuartas “y que no tienen posibilidades de llegar a meter un diputado”. “Vamos a apelar al voto útil de aquellos que no hayan votado al kirchnerismo”, acotó, apuntando a los votos de Felipe Biella y de Durand Cornejo.
Con respecto a la necesidad de crecer en el interior provincial, Zapata dijo que espera recolectar los votos radicales de Tartagal, que estuvieron apoyando a través de su intendente Mario Mimessi, “al oficialista Durand Cornejo en las primarias”.
La carrera por el tercer lugar
Por último, el candidato del Frente Salta Independiente y los renovadores, Felipe Biella, aún celebra el buen resultado obtenido en la capital salteña y sueña con arrebatarle el tercer puesto a Durand Cornejo y pelear una banca. Sabe que es a los votantes de Unidos por Salta a donde debe apuntar y a hacerse más conocido en los demás departamentos de la provincia, por lo que “ahora vamos a recorrer toda la provincia para explicar nuestra propuesta”.
Biella hizo hincapié en la independencia de su espacio, “somos un partido pequeño y nuevo que no tiene compromiso con nadie que no sean los salteños”, “no dependemos de ningún espacio nacional ni provincial, ni de ningún dirigente político”, expresó.
También resaltó que seguirán haciendo escuchar sus ideas en salud, trabajo y educación, “son rubros que conocemos muy bien porque venimos de ahí, no de la política”. Pero aclaró que quieren ser una oposición constructiva “para encontrar a través del diálogo y el consenso una posible solución a los problemas de Salta”. Y rechazó la idea del “voto útil” que piden algunos candidatos, “esos estuvieron años en el poder y a los salteños siempre les fue mal”, esgrimió con respecto a Juntos por el Cambio y el Frente de Todos.
“La verdadera grieta hoy es entre la dirigencia política que está hace muchos años y los problemas y necesidades de la gente”, concluyó.