La discusión de base en el Frente de Todos, sobre si el modelo económico gasta o ahorra, tuvo un nuevo episodio en una declaración del ministro de Economía, Martín Guzmán, que sentó posición sobre el asunto. El funcionario comentó que mantiene “un diálogo franco y firme, sobre la base de las convicciones”, con la vicepresidenta Cristina Fernández, pero aclaró que “yo soy uno de los que le dice que no” a su idea de que en la Argentina hay un ajuste fiscal. “En Argentina ha habido una política fiscal expansiva”, completó Guzmán en diálogo con Víctor Hugo Morales en AM 750.
"En la carta ella manifiesta que considera que hay un ajuste fiscal, aunque le digan que no... pero yo soy uno de los que le dice que no: en Argentina ha habido una política fiscal expansiva", expresó el ministro. Y agregó que “a uno le gustaría poder hacer más, pero para eso hay que contar con instrumentos que en la Argentina no hay". Asimismo, Guzmán le dio de algún modo cierta razón a la vicepresidenta, al aseverar que “tal vez se podrían haber implementado algunas medidas antes; es importante escuchar el resultado de las urnas".
Respecto a la idea de la discusión interna por los cambios en el modelo, el funcionario explicó que “lo que buscamos es trabajar de una forma que permita ir construyendo los entendimientos y las condiciones para modificar lo que haya que modificar y mantener lo que se tenga que mantener". "Hay una forma engañosa de contar lo que se está haciendo -siguió-, que no tiene que ver con las elecciones, sino con cuidar a los argentinos y fortalecer el poder adquisitivo del pueblo trabajador". Y concluyó que "las circunstancias económicas van cambiando y nos piden que nos adaptemos. Todo lo que estamos anunciando para los próximos días ya está proyectado presupuestariamente". Con esta última aseveración se pone en duda, por caso, alguna medida que había empezado a discutirse, como el posible regreso del IFE 4 a medida, dado que supondría una erogación bastante mayor a la presupuestada.
El déficit
“¿Y por qué entonces se reduce el déficit?”, se preguntó el ministro en la charla con Morales en la 750. Respondió que “por dos motivos: primero porque la recaudación creció y segundo por la reestructuración de la deuda que nos permitió bajar el pago de intereses. Por lo tanto, el déficit total cae, pero el gasto aumenta”. En esa línea, expresó que “hoy hay una política fiscal que ha potenciado la recuperación económica que la Argentina está viviendo, cuidando siempre evitar que haya en el país crisis cambiaria, porque las crisis cambiarias son de lo peor que le puede pasar a una economía porque genera más pobreza, más desigualdad y más desestabilización”.
De todos modos, aclaró que “obviamente nos hubiese gustado hacer más, pero para eso hay que contar con instrumentos. En la Argentina no hay crédito y la moneda está muy debilitada”. En ese sentido, destacó que hay cuestiones en la carta de CFK “en las que estamos de acuerdo. Por ejemplo, no se pudo ejecutar todo el gasto de capital. Eso hay que ir mejorándolo. Hay que ir adaptando la política económica para que haya un impulso mayor para que se pueda fortalecer la recuperación, y eso es lo que vamos a estar haciendo en estos días”. Aún con esa aclaración, fue concreto al afirmar que “no hay un cambio en los planes de cómo se financia la política fiscal que estamos llevando a cabo”.
La deuda con el Fondo
“Enfrentar este pago que se le hace al FMI no tiene que ver con que nos guste o no, sino con un sentido de la responsabilidad, entendiendo que hay caminos que son realmente desestabilizantes y peores”, destacó respecto al pago con DEG de 1885 millones de dólares que se realizó este miércoles. El primer desembolso del crédito leonino que tomó la administración de Mauricio Macri.
“El camino que buscamos construir es el de un acuerdo (con el FMI) en el cual se haga lo que nosotros creemos que le hace bien a la Argentina”, adelantó. En tren de fomentar la mejora económica para ir hacia un plan sustentable, consideró el ministro que “el relajamiento de las restricciones sanitarias ayuda a la economía porque tiene un impacto en el sector de los servicios que es el que más empleo menos entrenado genera. Mejora la situación de los sectores informales que son los que más han sufrido”.
Inflación, subsidios y salarios
Guzmán refirió al alza de 13 por ciento extra para el Salario Mínimo, aprobada el martes. “En el año va a crecer 55,3 por ciento”, destacó. Y agregó que “mueve a toda la estructura salarial y ayuda a que este año el poder adquisitivo de los ingresos salariales crezca”. Asimismo, dijo que el “salario formal registrado viene creciendo. Hay una recuperación de la economía que es heterogénea y estamos buscando que sea menos heterogénea. Medidas como las de ayer ayudan a que la recuperación sea menos heterogénea y llegue a todos”. Por el lado de los subsidios a la energía, destacó que “se busca la segmentación de subsidios para que tengamos un sistema que proteja a los sectores más vulnerables y quienes pueden pagar, lo hagan”.
La inflación, tema central para el país, fue otro de sus temas. “Es un mal para el funcionamiento de un sistema económico (…) la Argentina está en una tendencia de reducción de la inflación, obviamente con posibles fluctuaciones. Todo el esquema de política macro apunta a un objetivo de reducción”, diagnosticó. “Para resolver el tema de la inflación hay que resolver las múltiples causas que la generan. Después está la coordinación entre empresarios y trabajadores, donde hay que ir continuar mejorando para ir resolviendo los problemas de la inercia del proceso inflacionario”, explicitó.
En esa línea, criticó el rol empresario en el marco de la puja distributiva al decir que “hemos visto dos sectores en la mesa, la comunidad empresaria y los trabajadores que han exhibido capacidades distintas en términos de organización y de coordinación. Tenemos un sindicalismo con esas capacidades muy valiosas. No hemos visto esa capacidad de coordinación del otro lado de la mesa”.