El Consejo Industrial del Mercosur emitió este miércoles una declaración donde solicitó institucionalizar el diálogo entre los gobiernos y las confederaciones industriales de los países miembros del bloque para tratar temas que son determinantes para la competitividad de las firmas manufactureras, como la reducción unilateral del Arancel Externo Común y del Régimen de Origen del bloque. “Es necesario articular mejor entre el sector público y el privado para que los cambios que finalmente se adopten generen, efectivamente, mejores condiciones para el desarrollo de las economías de los cuatro Estados parte”, aseguraron.
A raíz de la presión que vienen ejerciendo Brasil y Uruguay para flexibilizar el Mercosur, los gobiernos están negociando una reducción del Arancel Externo Común. El objetivo es introducir cambios para no romper el bloque, pero tratando de no desproteger a los sectores sensibles. El gobierno de Bolsonaro había propuesto una baja lineal del 20 por ciento que fue rechazada por la administración de Alberto Fernández, que contraofertó una reducción del 10 por ciento segmentada y enfocada principalmente en insumos. Las confederaciones industriales siguen con preocupación esa posible flexibilización y por eso es piden ser escuchadas en ese debate de manera institucionalizada.
En la declaración, la Unión Industrial Argentina, la Confederación Nacional de la Industria de Brasil, la Unión Industrial Paraguaya y la Cámara de Industrias del Uruguay también pidieron que los gobiernos profundicen el diálogo, garantizar la libre circulación de bienes, consolidar un entorno favorable para el desarrollo del intercambio comercial, internalizar los compromisos ya firmados, ampliar los compromisos intra-Mercosur y avanzar en una agenda externa común.
En lo que respecta a la ampliación de los compromisos intraMercosur, aseguraron que la libre circulación de bienes y servicios es un objetivo fundamental del Tratado de Asunción, que aún está pendiente de ser alcanzado. “En tal sentido, la Presidencia Pro Tempore brasileña puede concretar avances en materia de convergencia regulatoria y reconocimiento mutuo de certificaciones, registros y habilitaciones. Adicionalmente se debería ratificar el Protocolo de Facilitación de Comercio y la profundización de las reglas y compromisos del Protocolo de Servicios”, destacaron.
A su vez, sobre la agenda externa común señalaron que “la integración extrabloque del Mercosur es un factor importante para la recuperación de la competitividad de los países y exige priorización y gradualismo”. Las cuatro entidades propusieron que, durante la presidencia Pro Tempore de Brasil, se hagan movimientos concretos para lograr la firma y ratificación de los acuerdos ya celebrados, como con la Unión Europea y el EFTA, de avanzar con las negociaciones en curso e iniciar otras con países de América Central y el Caribe.
Durante la discusión del documento, el presidente de la UIA, Daniel Funes de Rioja, señaló que “el mundo actual plantea un escenario de gran incertidumbre en materia de comercio internacional y producción, por eso es clave fortalecer la cooperación regional en el ámbito del Mercosur, como bloque donde los gobiernos y los sectores productivos dialoguen y aúnen esfuerzos para mejorar la calidad de vida de los ciudadanos, donde a partir de reforzar las cadenas regionales de valor –incorporando nuevas tecnologías- se avance en estrategias de inserción internacional, para que se genere empleo de calidad que contribuya a luchar contra la pobreza y las asimetrías existentes en nuestra región”.