El secretario general de la ONU, António Guterres, alertó hoy una vez más sobre el impacto que tiene el cambio climático en la seguridad en el mundo, durante una sesión ministerial del Consejo de Seguridad que sigue dividido sobre este asunto.

"Ninguna región está a salvo. Los incendios forestales, las inundaciones, las sequías y otros fenómenos meteorológicos extremos afectan a todos los continentes", recordó la máxima autoridad de la ONU, informó la agencia AFP.

Sostuvo que "los efectos del cambio climático son particularmente profundos cuando se superponen a la fragilidad y a los conflictos pasados y actuales. Está claro que el cambio climático y la mala gestión del medio ambiente son multiplicadores de riesgos", añadió durante un debate abierto sobre el mantenimiento de la paz y la seguridad internacionales. En consecuencia, y cuando se cuenta con capacidades de respuesta limitadas y una disminución de recursos naturales, avisó que pueden dispararse los agravios y las tensiones dificultando los esfuerzos de prevención de conflictos y el mantenimiento de la paz.

Para ilustrarlo, recurrió al ejemplo de Somalia donde “las sequías e inundaciones, más frecuentes e intensas, están socavando la seguridad alimentaria, aumentando la competencia por los escasos recursos y exacerbando las tensiones comunitarias existentes" . En este sentido, recordó que "el año pasado más de 30 millones de personas fueron desplazadas por catástrofes relacionadas con el clima".

Para minimizar el impacto del cambio climático, hay que comprometerse "sin ambigüedades" y llevar a cabo "acciones creíbles para limitar el calentamiento climático a 1,5ºC", aseveró.

Pese a todas estas amenazas, Guterres lanzó un mensaje de optimismo y señaló que todavía estamos a tiempo de actuar y conseguir que las acciones climáticas contribuyan a la paz y a la seguridad internacionales.

Para logarlo enumeró las tres prioridades básicas: 

  • mantener el compromiso de todos los países para limitar el calentamiento global de no superar los 1,5 grados centígrados del Acuerdo de Paris.
  • Lograr grandes avances en materia de adaptación y resiliencia destinando al menos el 50% de la financiación climática mundial
  • Reforzar mutuamente la adaptación al clima y la consolidación de la paz


La última reunión del Consejo de Seguridad sobre la relación entre el clima y la seguridad tuvo lugar en febrero a nivel de jefes de Estado y Gobierno. Las divisiones entre los miembros imposibilitaron cualquier declaración, lo que parece que volverá a ocurrir este jueves.

En febrero, Rusia en particular, pero también China e India, se mostraron reticentes a que sea el Consejo de Seguridad donde se debatan estos asuntos así como los conflictos que genera, como lo sugieren los países occidentales.

Moscú no se opone a analizar caso por caso la relación entre el clima y la seguridad, pero considera, al igual que otros países, que el Consejo de Seguridad no es el mejor foro para debatirlo.