El Frente de Todos presentó esta semana un proyecto de ley que busca transformar los planes sociales en puestos de trabajo formal. La iniciativa busca facilitar las condiciones de acceso al empleo formal a través de incentivos para empresas que contraten a trabajadores que cobren programas sociales. 

La iniciativa surgió en medio del debate por el futuro de los planes sociales que adquirió relevancia en plena campaña electoral: mientras que un sector de la oposición “libertaria” insistió en su eliminación, en el Gobierno insistieron en la “transformación” hacia puestos de empleo formales.

El proyecto fue presentado por la senadora nacional por Santa Fe, María de los Ángeles Sacnun, y el objetivo es “potenciar el trabajo, incrementar la productividad y el desarrollo económico”. Consultada por AM750 y Página/12, reconoció que en los barrios “la ciudadanía plantea la necesidad de generar trabajo”. “Quieren tener un empleo, un futuro y un horizonte y no depender solamente de la buena voluntad del Estado”, señaló.

Se trata de uno de los debates clave: en plena campaña electoral, el presidente Alberto Fernández acusó a Mauricio Macri de triplicar los planes sociales en apenas cuatro años, y recordó que en 2015, cuando Cristina Kirchner abandonó el poder había alrededor de 200 mil y hoy superan los 600 mil.

Quiénes estarían alcanzados

El “Programa Integral más y mejor trabajo argentino” que pretende crear la senadora oficialista busca “contribuir al sostenimiento y la promoción del empleo genuino” e impulsar beneficios para PyMES, cooperativas y actores de la economía popular que contraten a quienes perciben planes, así como también la formación profesional.

“La legislación debe acompañar un modelo económico que expanda la economía y genere puestos de trabajo. De ninguna manera se pueden generar más puestos precarizando y flexibilizando, sino garantizando el pleno goce de los derechos”, puntualizó Sacnun, que cruzó la propuesta de Juntos por el Cambio para eliminar las indemnizaciones por despido. “Proponemos reconvertir los planes en los que el Estado aporte dinero para convertirlos en trabajo genuino, en la medida en que se comienza a recuperar la economía”, agregó.

Grupo Octubre · María de los Ángeles Sacnun

Según el proyecto, los beneficiarios podrían ser quienes perciban programas del Ministerio de Trabajo, el plan Jóvenes con más y mejor trabajo, Seguro de capacitación y empleo y Seguro de desempleo. También el plan Progresar y el Potenciar Trabajo, así como quienes hayan participado de un proyecto de Entrenamiento para el Trabajo y egresados de cursos de formación profesional que promueva la cartera laboral.

“El desafío es convertir la finalidad protectora que tiene el Estado, donde se busca evitar que una situación de pobreza termine en indigencia, pero que no logran salir de la reproducción de la pobreza”, sostuvo. 

Por eso, el plan es unificar los planes “bajo una misma modalidad” con la “perspectiva de tratar de acompañar a los sectores más castigados por la desocupación”.

“En los barrios nos que quieren trabajo, no planes”

- Hace unos días se viralizó un artículo de Mayra Arena, la joven que en 2018 en una charla TED habló de “qué tienen los pobres en la cabeza”, aseguró que en muchos barrios pobres no querían cobrar más planes. ¿Se observa eso en el territorio?

Nos lo dicen todo el tiempo. Lo primero que plantean es la necesidad de generar puestos de empleo, quieren un futuro, un horizonte y no depender de la buena voluntad del Estado. La protección es necesaria e ineludible, el Estado muchas veces aparece como ambulancia para recoger los heridos que deja el sistema. El peronismo siempre tuvo en su esencia la generación de trabajo. Por eso queremos reproducir un empleo digno, con posibilidad de ascenso social y salir de los planes e ir hacia un empleo decente, sin que el Estado se corra del rol de protector.

El rol de los movimientos sociales

Sacnun destacó el rol de los movimientos sociales es clave en la transformación de los planes en puestos de trabajo. “Tienen mucha importancia para capacitar a los trabajadores, deben formar parte ineludiblemente del fortalecimiento del tejido social”, señaló, y aclaró que la medida no busca “dejar afuera” a las organizaciones, sino “que puedan formar parte de la reconversión junto con el movimiento obrero organizado”.