Más de 60 millones de alemanes están habilitados para participar este domingo de las elecciones. Los socialdemócratas y los conservadores se disputan la sucesión de Angela Merkel, quien dejará la cancillería tras 16 años.

Encuestas y resultado ajustado

Las encuestas proyectan un resultado muy ajustado con el bloque conservador de Merkel, Unión Demócrata Cristiana (CDU-CSU), con alrededor de 23% de las intenciones de voto, detrás del socialdemócrata SPD con 25%.

Los centros de votación estarán abiertos hasta las 18:00 (13:00 de Argentina) y ya se registraron los votos de algunos de los actores principales de la política germana.

El presidente alemán, Frank-Walter Steinmeier, votó esta mañana en su colegio electoral de Berlín y alentó a la participación ciudadana, porque "quien vota da vida a la democracia".

La disputa por la cancillería quedó como un duelo entre dos hombres: el ministro de Finanzas y vicecanciller Olaf Scholz, de 63 años, del SPD, frente a Armin Laschet, 60 años, de la alianza conservadora de Merkel.

Voto anulado

Laschet fue noticia tras emitir su voto. El político alemán dobló al revés su boleta electoral antes de depositarla en la urna, con lo que quedó perfectamente visible para los presentes el candidato elegido. Según la ley electoral alemana, debería ser anulado.

Los fotógrafos registraron el momento, consignó la agencia DPA. El voto en Alemania es secreto, así que según explica la Comisión Electoral alemana el votante debe "doblar (la papeleta) de forma que su voto no sea reconocible". Si ese voto es reconocible, debe ser considerado nulo durante el recuento, informa la televisión pública alemana ARD.

Al margen de este episodio, tras votar, Laschet llamó a la participación ciudadana y destacó la trascendencia histórica de estas elecciones.

Angela Merkel

Tras el escrutinio, el parlamento alemán tiene previsto reunirse el 26 de octubre. Esa será la fecha en la que se resuelva formalmente la sucesión de Merkel.

El nombre del futuro canciller y la composición de su probable mayoría corre el riesgo de no conocerse este domingo.

Todo indica que serán necesarias largas e intensas negociaciones para formar una coalición, por lo que podría producirse una parálisis hasta el primer trimestre de 2022.

Siguiendo esta hipótesis, la canciller podría permanecer en el cargo durante el periodo de negociación.