"No Filter Tour" es la gira que los Rolling Stones pusieron en marcha anoche en la ciudad estadounidense de Saint Louis, después de que la pandemia los obligara a suspenderla de manera indefinida. La vuelta tuvo, sin embargo, el filtro del recuerdo de Charlie Watts, el legendario baterista de la banda que falleció el 24 de agosto pasado. "Vamos a extrañarlo mucho, en el escenario y fuera de él", dijo Mick Jagger, acompañado por Ron Wood y Keith Richards al frente del escenario.  

Poco antes del inicio del concierto, en las pantallas que estaban al fondo del escenario se vieron diversas imágenes en primer plano de Watts. Jagger hizo la primera mención a su compañero antes de abordar "It´s Only Rock and Roll", el segundo tema del repertorio previsto. Fue entre el segundo tema de la lista y antes de dedicarle  "Tumbling Dice" para continuar con el show de 19 temas que dieron anoche, que los tres stones se detuvieron a hablar de cómo será seguir sin el histórico baterista.

Fuera de estos homenajes, el show tuvo un alto nivel, con Jagger al frente como de costumbre, y una electrizante performance musical, con algunas perlas, como la aparición en el repertorio de "19th Nervous Breakdown", un tema de 1966 que hacía varios años que no sonaba en vivo. Un clásico del origen blusero de los Stones, interpretado en Saint Louis, todo puede ser una homenaje a los ritmos que conquistaron a Watts --declarado amante del jazz-- para acercarse a la banda. 

El resto del repertorio, que inició con "Street Fighting Man", revisitó los clásicos del grupo, con la sola ausencia de "Brown Sugar", una canción con la que usualmente los Rollings solían cerrar sus shows. Como se había anunciado de antemano, el lugar de Watts fue ocupado por Steve Jordan, un viejo conocido del grupo, quien intentó respetar el toque original de batería en cada tema.

El regreso de los Rolling y escena con la fan argentina

Aunque no hubo más alusiones al baterista en el resto del concierto, hubo un momento especial cuando Keith Richards avanzó sobre una pasarela que prolongaba el escenario hacia el público, mientras interpretaba el solo final de su canción "Slipping Away" y se topó con una bandera colgada en la vallas en homenaje al músico fallecido.

Se trataba de un lienzo con la imagen del baterista y las leyendas "The coolest" ("El más cool") y "Charlie is our Darling" ("Nuestro querido Charlie") que portaba una fan argentina que suele viajar a distintas partes del mundo siguiendo a la banda.

En ese momento, Richards frenó su marcha, miró la bandera durante casi un minuto, bajó la cabeza y, con visibles signos de emoción en sus ojos, volvió sobre sus pasos, según narró a Télam Lucille Muse, la fan argentina.

"Es como que se fue por un rato del show, los ojos se le fueron. Fue súper emotivo, hubo una conexión porque fue como decirle que lo acompañaba en el sentimiento y él reaccionó de esa manera", contó.

En tanto, el escenario tuvo dimensiones menores a los que suelen montarse en cada concierto de la banda, por lo que permitía al público una cercanía mucho mayor a la banda en relación a otros shows en estadios.

"Había como una fraternidad entre ellos. Se nota el amor a lo que hacen, que lo valoran y que están contentos de volver a tocar", interpretó la fan argentina en diálogo con Téla,. El "No Filter Tour" continuará hasta el 20 de noviembre con una docena de fechas más en distintas ciudades estadounidenses.