Un documental del New York Times reveló que el padre de Britney Spears espiaba a la cantante a través un sistema de vigilancia que incluía desde el monitoreo de sus llamadas y conversaciones hasta la grabación de audio adentro de su dormitorio, sistema que había sido instalado por una empresa de seguridad contratada por Jamie Spears.

Según consignó el diario, un empleado de la empresa de seguridad Black Box, Alex Vlasov, reconoció que se grabaron conversaciones con los hijos y el novio de la artista.

El documental, titulado "Controlling Britney Spears" (Controlando a Britney Spears), se puede ver en la plataforma Hulu. Se estrenó casi al mismo tiempo que el de Netflix: "Britney vs Spears".

Mientras que el documental del NYT se centra en el "intenso aparato de vigilancia que controlaba cada movimiento que hacía la estrella del pop", el de Netflix analiza los giros que dio la vida de la cantante al pasar de ser una artista infantil a una diva del pop y finalmente a vivir presa de su fama y de sus problemas mentales.

Según el testimonio de Vlasov al NYT, la "implacable vigilancia" a la que fue sometida Britney Spears, bajo la tutela de su padre durante 13 años, "ayudó a varias personas vinculadas a la tutela, principalmente su padre, James Spears, a controlar casi todos los aspectos de su vida".

En más de una oportunidad, Britney criticó todos los trabajos que se publicaron sobre su vida asegurando que explotaban su dramática situación personal.

El fin de la tutela

El próximo miércoles está prevista una audiencia en la Corte Suprema de Los Ángeles que podría decidir el futuro de la tutela legal de la cantante.

Hace unas semanas, el padre de Britney entregó unos documentos en los que se mostraba favorable a poner fin a la tutela que él mismo controló durante 13 años. "Los acontecimientos recientes relacionados con esta tutela han puesto en duda si las circunstancias han cambiado hasta tal punto que es posible que ya no existan motivos para establecer una tutela", afirmó el progenitor.

El abogado de Britney, Mathew Rosengart, pidió esta semana que se ponga un cese "inmediato" y efectivo el mismo día de la vista judicial, ya que además del rechazo de la cantante a su padre, necesita firmar un acuerdo prematrimonial con su nuevo prometido.

La semana pasada, Britney anunció su compromiso matrimonial con Sam Asghari, su novio desde hace cinco años.