La mujer elegió un plan de ahorro para comprar el auto C3 Pack Zenit Exclusive que, entre sus atribuciones, incluía llantas de aleación cromadas. Sin embargo, cuando le fue entregado, no poseía dichas llantas. La compradora hizo los reclamos correspondientes a la concesionaria Marseilles y al Círculo de Inversores. Como no obtuvo repuesta, fue a la justicia. Peugeot Citroën argumentó que esas lantas habían dejado de ser fabricadas. El juez civil y comercial Pedro Boasso no sólo rechazó esa excusa sino que condenó a la fábrica de autos a pagar 92 mil pesos, más intereses y costas, a la mujer que reclamaba sus llantas cromadas.