La confirmación de las sentencias contra el exgerente de manufactura de la automotriz Ford Pedro Müller y del exjefe de seguridad Héctor Francisco Jesús Sibilla fue celebrada por referentes de derechos humanos. “Es un fallo histórico”, dijo el secretario de Derechos Humanos de la Nación, Horacio Pietragalla Corti, a Página/12 en referencia a la sentencia dictada por la Sala II de la Cámara Federal de Casación.
“Me hubiese gustado que Pedro Troiani lo hubiese podido vivir”, reconoció Pietragalla Corti. Troiani es uno de los extrabajadores de la Ford que llevaron adelante por décadas la demanda de justicia. “Desde la Secretaría estamos impulsando un acuerdo de cumplimiento del informe dictado por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) en el caso Troiani y ésta es una buena ocasión para que la empresa Ford de hoy, dé un paso y empiece de forma institucional a contribuir con el proceso de memoria, verdad y justicia que protagoniza nuestro país", reclamó.
“Esta sentencia permite, por un lado, cerrar una enorme etapa de lucha de los trabajadores secuestrados en la fábrica Ford y de sus familias, que han tenido que soportar no solamente el accionar del terrorismo de Estado sino también las enormes dilaciones por parte del Poder Judicial”, evaluó la ministra de Mujeres, Géneros y Diversidad Elizabeth Gómez Alcorta, que actuó como abogada querellante en el juicio que en 2018 terminó en la condena de Müller y Sibilla.
“Así como lo hizo en su momento la sentencia condenatoria, esta resolución judicial viene a poner en su lugar la responsabilidad de sectores del empresariado en nuestro país para llevar adelante las graves violaciones a los derechos humanos para que quede claro que no solamente fueron las fuerzas armadas, las fuerzas de seguridad, los actores eclesiásticos y el Poder Judicial sino también el sector empresarial quienes llevaron adelante los crímenes de la dictadura cívico-militar”, resaltó Gómez Alcorta, a quien el fallo de la Casación sorprendió fuera de Buenos Aires.
"Este fallo viene a demostrar que en la época de la última dictadura los grupos al margen de la ley --sobre todo militares-- no fueron los únicos actores implicados en graves violaciones a los derechos humanos, pues también participaron actores económicos, como las empresas, cuyos directivos contribuyeron en gran medida para posibilitar actos contrarios al irrestricto respeto de los derechos humanos", coincidió el fiscal Marcelo García Berro que actuó en el juicio.
"La rendición de cuentas por la complicidad de esos actores es todavía una cuenta pendiente de la Justicia en la medida en que las víctimas de esos hechos o sus familiares tienen derecho a la verdad, la justicia, las reparaciones y las garantías de no repetición. El caso de Ford y la sentencia recaída en la causa demuestra la forma en que, pese a contextos negativos para que los directivos de empresas rindan cuentas y ante la presencia de poderosos actores de veto, la fuerza de la movilización y militancia de víctimas y/o familiares de ellas, organizaciones de trabajadores y organismos de derechos humanos es capaz de lograr avances sustanciales en el campo de la justicia y posibilitar el dictado de sentencias como la que acabamos de conocer", añadió el fiscal.
“Esta sentencia marca un hecho de resonancia internacional”, consideró la historiadora Victoria Basualdo, investigadora del Conicet-Flacso y coordinadora de una unidad especial de investigación sobre responsabilidad empresarial en la Secretaría de Derechos Humanos. Basualdo explicó a este diario que lo que señala el fallo es que los sujetos empresariales son juzgables y se mete de lleno en una discusión vigente en el mundo sobre la responsabilidad de los sectores corporativos. “Es una sentencia muy contundente que recoge lo que fue un proceso judicial que se demoró mucho tiempo y, en simultáneo, condensa un proceso de acumulación de cuatro décadas”, agregó.
“Es un fallo muy trascendente”, destacó Sol Hourcade, coordinadora del equipo de Memoria, Verdad y Justicia del Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS). La abogada remarcó que ésta es la primera sentencia a responsables empresariales que es revisada y confirmada por Casación, ya que en 2017 ese tribunal había absuelto al empresario Marcos Levín. “Quedará la instancia de la Corte. Habrá que seguir atentos y atentas a los tiempos para que quede firme lo antes posible”.