Metele que son pasteles
El paraíso de los que aman los dulces: un club que cada mes envía a domicilio ingredientes, utensilios y una receta para jugar a ser un profesional en casa. De eso se trata Club Pastelero, la propuesta elaborada por La Botica del Pastelero, un bazar de Chacarita especializado en repostería. “La Botica la crearon Adriana y Yamila hace diez años. Ellas son pasteleras y buscaron reunir en un local todo lo que no se conseguía en el país. Incluso diseñaron una línea propia de 30 herramientas”, cuenta Sai, a cargo de la gestión del Club.
La idea es simple y efectiva: cada mes envían una preciosa caja repleta de sorpresas que incluye una experiencia completa: un set completo con utensilios (podrán ser cortadores, cornets, láminas, moldes, etc), ingredientes (chocolate, nueces, dulce de leche, harina, azúcar impalpable, polvo de hornear), merchandising (stickers, pines, lapiceras), una playlist con música para cocinar y una receta de un pastelero invitado con una muestra del producto final. Ejemplo: en septiembre, el primer mes del club, la repostera invitada fue Melissa Rollhauser, la creadora de Ghanium, una marca de alfajores artesanales realmente deliciosos. Entonces, esta caja incluyó dos alfajores listos (para poder probarlos) junto con una medida de café especialidad; y sumó todas las materias primas para preparar luego alfajores de nuez rellenos de dulce de leche con cobertura de chocolate blanco.
Lo mejor de todo es que funciona: siguiendo la receta salen unos quince alfajores de tamaño generoso y un sabor capaz de competirle a los mejores del mercado. “En octubre haremos unos brownies con mantequilla de maní y sal, con receta de Oh Cupcakes. La idea es que cada mes la caja te sorprenda, que traiga muchas cosas que no esperes”, cuenta Sai. El precio depende del largo de la membresía, desde $5490 por un mes a $4860 mensuales si es por seis meses). Un valor que, al incluir en cada envío herramientas profesionales, es muy competitivo.
Una buena idea con el mejor final posible: elaborar los propios dulces siguiendo las instrucciones de un profesional.
Para suscribirse escribir al Instagram @club.pastelero o entrar al sitio www.clubpastelero.com
Palito bombón postre
No son helados. La aclaración es necesaria porque la forma de los D-Pop remite a esos palito bombón clásicos que abundan en infancias callejeras. En este caso reeditaron aquella estética en un postre que se sirve de heladera (nunca congelado; si se guarda en freezer, la recomendación es sacarlo al menos 10/15 minutos antes) para expresar su sabor y textura. Son mousses artesanales y bañados en chocolate, que juegan con sabores. Desde el Argentino, de dulce de leche, chocolate y brownie, al Francia, de créme brulée con pedacitos de macarons y baño de chocolate con leche, pasando por otros más exóticos como el Guatemala (leche condensada y mango, con baño de chocolate blanco y escamas de coco y mango) o el Ghana, de banana, Nutella y chocolate negro, entre otros.
Son todos ricos, pequeños –recomiendan dos por persona, uno alcanza para satisfacer un capricho dulce– y preciosos ($1400 las diez unidades; $900 las seis). “Arrancamos hace cinco años: yo soy licenciado en marketing, venía de vivir afuera del país y acá me reencontré con una amiga, Nadua Odon, una pastelera de toda la vida. Ella desarrolló los D-Pop, me los hizo probar y me encantaron”, recuerda Mariano Arias, socio de la marca. Empezaron con deliveries desde un mini ambiente de 15m2, tuvieron éxito y hoy tienen una planta de 100m2, más sabores, mejor packaging. Sumaron también franquicias en Guatemala, Chile, Colombia y, desde finales de año pasado, estrenaron local a la calle en Palermo.
Con grandes producciones para eventos y catering (donde personalizan los D-Pop con mensajes y colores a pedido), la última novedad de la marca recupera tonos nostálgicos: acaban de lanzar galletitas absolutamente deliciosas, que toman la idea de esas latas danesas que, cuando se acababa su contenido, quedaban de costurero. Una caja de metal ($1700) con un popurrí de siete variedades de galletas (31 unidades en total), como el biscotti de almendras con naranja y chocolate, el sablé de limón o la lunette de frambuesa con chocolate blanco y pistacho, entre otras.
Un lujo al alcance de la mano.
D-Pop queda en Armenia 1712. Teléfono: 11-4145-5735. Horario de atención: martes a domingos de 13.30 a 21. Venta on line: www.dpop.com.ar. Instagram: @dpop.postre.
La vida por el chocolate
Cacao al 100%, manteca de cacao y cacao en polvo, todo de un solo productor de una única finca orgánica de Guayas, en Ecuador. Con esos ingredientes, azúcar y una mínima proporción de lecitina de girasol (a tono con las tendencias de los mejores productores mundiales, no usa lecitina de soja), el maestro Diego Armanini elabora cada día el chocolate que luego le da forma a sus bombones, tabletas y alfajores. Se trata de Rústico, el emprendimiento llevado a cabo por Diego que, desde hace unos meses, se mudó a una calle de Palermo y abrió por primera vez una ventana a la calle para comprar también ahí, además de mantener la venta online y telefónica que siempre tuvo.
Apenas cuatro personas trabajan en el lugar con ahínco y pasión para dar vida a productos que hacen agua la boca. Lo más vendido de la casa son las tabletas ($360 la unidad; hay promos como cinco por $1600), incluyendo la de 70% cacao con sal de Jujuy, otra con ají de Cachi o una más golosa de chocolate con leche y almendras tostadas. Se suman bombones, unas trufas increíbles de chocolate negro, mendiants con distintos toppings, también más infantiles ositos rellenos (de chocolate negro, chocolate con leche y chocolate blanco), así como unos perfectos mega bombones con nuez orgánica y dulce de leche, jugando con la tradición norteña ($460 las cuatro unidades).
“Estamos llevando toda nuestra producción a lo agroecológico, y ese concepto lo tomamos también para el packaging y los procesos de producción”, cuenta Diego. La última noticia son los alfajores, de los mejores del país, que ya son la nueva estrella de Rústico. A $150 la unidad (más económicos -y mucho más ricos- que algunos industriales), hay cuatro opciones: el clásico de dulce de leche cubierto en chocolate al 70% (nada de baño de repostería); de dulce de leche cubierto de chocolate blanco; el relleno de dulce de leche y mermelada casera de frambuesas orgánicas; y uno más de tapas de nuez con centro de pasta de maní y confitura de frambuesa.
Un viaje de ida al corazón del cacao, de la mano de un apasionado del chocolate.
Rústico queda en Godoy Cruz 1823. Teléfono: 11-4416-3029. Horario de atención: lunes a sábado de 10 a 18. Tienda: www.rusticochocolate.com. Instagram: @rusticochocolate.