Walter "Chino" Laborde y Diego “Dipi” Kvitko: dos potencias del tango siglo XXI que se vienen saludando hace quince años. Y que lo seguirán haciendo según cantan fecha, perspectivas y planes. Lo más próximo es la fecha, claro. El dúo dinámico guitarra + cantor vuelve al escenario del CAFF (Sánchez de Bustamante 772) el viernes 1° de octubre a las 21, bajo el objeto de conmemorar el aniversario. “Nos sobran motivos para festejar”, enfatiza el Laborde. “A pesar de estar viviendo un año jodidísimo a todo nivel -como seres vivos, como pueblo, como músicos trabajadores y como público-, es muy bueno subirse a esta sana 'moda' del reencuentro con estas canciones tremebundas, heredadas, que son el sentido de nuestro ser”.

El reencuentro, la primavera y el posible retorno a los días felices explican por sí el entusiasmo del cantor que supo colocar su voz en la Orquesta Fernández Fierro, y hoy reparte sus días entre otra más clásica que aquella (la Típica Sans Souci), un novel proyecto “rockero-bailable-cósmico” llamado Cosmonos, y Los Decoradores, banda formada por exmúsicos y técnico de los Redondos. “No están ni el Indio ni Skay, pero la misión es la misma: mantener viva la llama inextinguible de aquellos terribles tangazos de Solari-Beilinson”, juega Laborde.

Kvitko, en tanto, llega al sabor del reencuentro con un perfil más bajo. Desde la docencia, el sesudo estudio del instrumento y los prolegómenos de un segundo disco de guitarra solista. “La verdad es que estoy muy contento de haber logrado con el Chino construir un lenguaje propio dentro de las fronteras del tango”, aporta el guitarrista, que supo ser acompañamiento de Jorge Vidal, Néstor Fabián y Daniel Melingo, entre otros.

Lo más cercano de la alquimia entre ambos es el disco Tango/ Tango Volumen 5, Ntendé?, cuyos temas -más alguno a estrenar- serán la materia prima que hornearán en el concierto del CAFF. “Como siempre, el dúo se expresará en el andarivel de la perfecta unión entre música y poesía que tienen los clásicos del género… Estamos convencidos de que la poética del tango cuenta las vivencias que vivimos todos y todas, tarde o temprano”, profundiza Laborde. “De hecho, lo de Tango y Tango es porque se trata de una vieja expresión destinada a graficar el repertorio que está arraigado muy profundo en la gente… que es constitutivo y fundacional del género”.

-Y con base en Buenos Aires. A propósito, ¿hay una ciudad distinta, post pandémica, que noten con lente tanguero?

Chino Laborde: -Tengo la sensación de que particularmente en la Argentina se han potenciado muchas cosas fuleras, al tiempo que no hemos mejorado como imaginamos al inicio de esta etapa. Creo que nos cuesta mucho aprender, porque somos una "raza" muy contradictoria... Somos tango.

-¿Y en qué aspectos lo son ustedes, más allá de las generales de la ley?

Dipi Kvitko: -Bueno, para nosotros es una especie de "Constitución" ya que desde nuestros inicios y hasta la actualidad nuestro encuentro gira en torno a la reversión constante del repertorio tradicional… Es como una excusa para comunicarnos y expresar sentimientos con el lenguaje de género.