Unxs 9 de cada 10 referentxs territoriales reconocen situaciones de violencias de género en sus barrios, afirma “El conurbano en el segundo año de la pandemia”, cuarto relevamiento de los territorios populares en el contexto del Covid-19, que realizó el Instituto del Conurbano de la Universidad de General Sarmiento a 108 personas que residen y/o participan en localidades de los 24 partidos del conurbano bonaerense y en los municipios periurbanos de Escobar, Pilar, Luján y Zárate.
Dos de cada 10 referentxs manifiestan que las intervenciones estatales son nulas o con fuertes limitaciones. Señalan dificultades en la recepción de denuncias en las comisarías de la mujer, obstáculos para el acceso a la Justicia, las limitaciones de la misma judicialización, que no soluciona problemas estructurales, y se demanda particularmente la acción del estado municipal.
Más de la mitad de lxs referentxs destaca las intervenciones de organizaciones sociales y comunitarias: “Quienes forman estas instancias están atentas a las situaciones que se generan en el barrio, asesoran, acompañan a las damnificadas para la radicación de denuncias en la comisaría, articulan con los dispositivos de géneros a nivel municipal y también en otras instancias, como la gestión de inclusión en programas”, detalla el informe, que resalta la potencia de las organizaciones de mujeres y diversidades en la intervención directa.
“La mayor visibilidad de las situaciones de violencia en los barrios y las mencionadas intervenciones expresan la vitalidad de los feminismos, tanto del que se vertebra en el ámbito de la política institucional como de los feminismos populares que activan respuestas en organizaciones y agrupaciones específicas de géneros y disidencias, pero también en todo tipo de organización comunitaria y especialmente en los movimientos sociales territoriales, que van alojando crecientemente esta sensibilidad.”
La violencia machista al interior de los hogares es una preocupación que se expresa desde el inicio de los relevamientos, en marzo de 2020. En esta cuarta edición, “aparece mencionada en gran cantidad de casos como ´violencia familiar´, haciendo énfasis en que se vuelve no sólo contra las mujeres, sino también contra les niñes. En estrecha vinculación se menciona la preocupación por los casos de abuso infantil.”
