Durante la última asamblea celebrada por la Nación Diaguita del departamento Belén, y tras el reclamo de comuneros de la Comunidad Indígena de Aguas Calientes, se decidió que la mitad de los habitantes conformarán una nueva comunidad. La decisión se tomó luego de conocer que el cacique Honorato Casimiro había concedido un permiso a empresas mineras para explorar la zona. “La decisión del líder afectó la tierra de una de las familias del lugar y además incumplió los acuerdos marcos que tenía la Nación”, contó la abogada Andrea Leanza.
La Nación Diaguita de Belén está conformada por las comunidades indígenas de Laguna Blanca, Quimivil, Corral Blanco, Carachi, El Tolar, Chistín, Las Lajas y hasta el sábado 25 de septiembre, día en que se concretó la asamblea, por la comunidad indígena de Aguas Calientes.
Leanza quien representa legalmente a las comunidades de esta Nación, contó que el fin de semana los acompañó en la asamblea que se realizaba en la comunidad indígena de Corral Blanco. “Se trata de una asamblea, en donde los diferentes caciques se encuentran todos los meses y trabajan temas que tiene que ver con sus cuestiones, ya sean organizativas, de intereses o de gestión. Todos los temas se resuelven ahí”, aclaró.
Según su relato, ese día concurrieron a la asamblea entre 12 y 15 familias de la comunidad de Aguas Calientes para manifestar su preocupación ya que tenían conocimiento de que el cacique Casimiro había dado consentimiento para que empresas mineras pudieran explorar la zona de Peñas Negras. “Angustiados, manifestaron que el cacique no los estaba escuchando y pidieron ayuda”.
De esta manera, entre los caciques decidieron acompañar a los comuneros para hablar con Casimiro y pedirle respuestas, teniendo en cuenta que en 2019 firmaron entre todos un acuerdo en resguardo de sus tierras, y este líder lo estaba incumpliendo.
Los caciques y las familias se reunieron con Casimiro en Aguas Calientes, la abogada relató que “aunque yo me mantuve alejada, sé que fue un debate donde se expusieron intereses contrapuestos y que no se logró acuerdo. Los comuneros le pidieron al Cacique que les explique por qué les dio permiso a las mineras. Se trató de un reclamo legal ya que los pueblos y comunidades están muy bien organizados y tienen estatuto que establece cómo debe ser la toma de decisiones”, contó.
Para permitir la exploración, Casimiro había firmado un acuerdo que contaba “sólo con 24 firmas, cuando el estatuto establece que debe ser la mitad más uno, y Aguas Calientes tiene más de 110 familias”, explicó.
“Además estaba incurriendo en la violación a un estatuto mayor, que cada comunidad firmó en su momento y que establece el resguardo de su tierra y territorios por su buen vivir. Los comuneros le dijeron que ese consentimiento iba en perjuicio de la familia de Don Félix, un hombre de 85 años quien pidió por favor que se le resguarde. Pero Casimiro no quiso escuchar y por esta razón, la mitad de los comuneros de Aguas Calientes, decidieron proclamarse como una nueva comunidad, una facultad que la Ley les reconoce”, concluyó Leanza.
Luego de la asamblea, la Nación Diaguita emitió un comunicado al que tuvo acceso Catamarca/12. “Consideramos importante que el señor Cacique nos explique los motivos por los cuales está incumpliendo el Convenio Intercomunitario que firmara el día 6 de agosto de 2019 con vistas salvaguardar nuestros territorios ancestrales y que según nos cuentan los comuneros de Aguas Calientes estaría traicionando los principios del buen vivir y de la integridad de nuestra Santa Tierra Pachamama”, explican.
“El grado de violencia del cacique Casimiro hacia quienes fuimos y hacia sus propios comuneros y comuneras, y de negación al diálogo sobrepasó cualquier posibilidad razón. Por esto un número importantísimo de familias decidió necesario lograr su autonomía comunitaria. Es por esto que haciendo uso de su derecho a la autodeterminación y con la misma legalidad que ya lo hicieron las comunidades de La Angostura y de Carachi en su momento se creó la Comunidad de Peñas Negras”, refieren.
Intervención policial
Por otra parte, señalaron que la policía del lugar tomó conocimiento de lo sucedido “y llegó a los territorios con vistas de desalentar al cacique de la nueva Comunidad Indígena de Peñas Negras”, cuentan y agregan que "Luego hicieron trascender un comunicado interno y policial a los medios de prensa, desinformando a la opinión pública"
Por último, le solicitan al gobernador Jalil “que tome cartas en el asunto e inicie una investigación policial para saber quién hizo trascender el comunicado policial para amedrentar a nuestros líderes esgrimiendo argumentos atentatorios contra la organización del movimiento indígena”.
