Pese a no haber salvado todas sus irregularidades y mantenerse un proceso de investigación por conflicto de intereses, el Ministerio de Transporte le otorgó a Avian Líneas Aéreas (Avianca) las rutas solicitadas para ampliar su oferta de vuelos en el país. La aerolínea de origen colombiano, que adquirió la empresa de la familia Macri (Mac- Air), obtuvo la concesión por 15 años de las 16 rutas solicitadas. Se trata en su mayoría de destinos domésticos que operaba MacAir subsidiados por provincias y municipios. La denuncia de gremios y legisladores de la oposición considera que hubo una promesa de asignación de destinos y frecuencias como parte del acuerdo de venta de la empresa de Macri. Avianca sumó otras rutas de cabotaje e internacionales. La firma fue también autorizada a utilizar Aeroparque Jorge Newbery y el Internacional de Ezeiza, pese al colapso que existe en esos aeropuertos.
La aerolínea había solicitado sumar rutas durante una audiencia pública en diciembre, acto con el que el gobierno abrió las puertas a un proceso de flexibilización del espacio aéreo. Las rutas fueron aprobadas pero su adjudicación se postergó debido a denuncias e irregularidades en la documentación presentada por Avianca. En marzo del año pasado la colombiana Avianca, una de las principales líneas aéreas de la región, compró MacAir, generando un nuevo escándalo de conflicto de intereses. En marzo de este año el fiscal Jorge Di Lello imputó al Presidente, a su padre Franco y a funcionarios y empresarios por “presuntas irregularidades” en la concesión de rutas a Avianca tras la venta de Mac- Air. La ANAC, a través de la Junta Asesora de Transporte Aéreo, le había dado curso favorable a las 16 rutas pedidas por Avianca. Todas eran para operar desde Buenos Aires y llegar a ciudades como Santa Fe, Rosario, Comodoro Rivadavia, Concordia y Sunchales, entre otras. La denuncia conlleva la presunción de fraude en la venta de MacAir a Avianca por un supuesto acuerdo que habría incluido la promesa de garantizarle esas rutas.
Por su parte, el trámite de Avianca que presentó en noviembre para operar nuevas rutas aéreas incluyó documentación con sellos y fechas posteriores a los primeros dictámenes de las autoridades aéreas, que habilitaron el plan aéreo de la empresa. Avian Líneas Aéreas remitió un certificado de la firma panameña Sinergy Aerospace, como garantía de capital para la filial argentina, cuya elaboración, legalización y sellados fueron posteriores a los dictámenes de la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC). “Hubo muchas irregularidades en el proceso, además de la judicialización por conflicto de intereses. Por eso no es comprensible ni legítimo que el Ministerio de Transporte la autorice”, señaló a este diario el ex titular de Aerolíneas Argentinas Mariano Recalde.
Por ambas situaciones debía expedirse la Oficina Anticorrupción (OA) y la Sindicatura General de la Nación (Sigen), quien finalmente dieron el aval para que se les otorgue las rutas. Los entes de regulación dictaminaron que “no hay conflicto de intereses” entre Macri y Avianca, al argumentar que la familia presidencial “no tiene actualmente vinculación societaria ni comercial alguna ni con el Presidente ni con su familia, ni así tampoco con las empresas Socma Americana ni Sideco Americana”. Ayer, dos días después de ese dictamen, el ministro de Transporte, Guillermo Dietrich, estableció que Avianca podrá explotar “servicios regulares internos e internacionales de transporte aéreo de pasajeros, carga y correo” en las rutas que unen Buenos Aires con Santa Fe, Puerto Madryn, Viedma, Mar del Plata, Comodoro Rivadavia y Puerto Madryn. También las rutas entre la Ciudad de Buenos Aires con San Luis, Río Cuarto, Santa Rosa, Bahía Blanca, Concordia, Paso de los Libres, Paraná, Sunchales, Tandil y Villa María. En el ámbito internacional, le otorgó rutas Buenos Aires-Montevideo (Uruguay) y Buenos Aires-Porto Alegre (Brasil).
Además de los visos de ilegalidad, la apertura de los cielos perjudicará en especial a Aerolíneas Argentinas. “Más allá de lo que diga el gobierno de Cambiemos, se achicó el mercado doméstico y se incrementó el número de competidoras para Aerolíneas”, agregó Recalde. El ex presidente de la línea de bandera aseguró que será imposible para Aerolíneas mejorar su situación económica en este contexto. “Deberían entregarles rutas de fomento a las low cost y no las mismas en las que ya opera AA”, opinó.