Un futbolista brasileño fue detenido y acusado de intento de homicidio por la violenta patada que le propinó a un árbitro en la nuca estando este en el piso, en un partido de la Segunda División de la liga estadual de Río Grande do Sul.
Willian Ribeiro, delantero del Sao Paulo de Río Grande, fue detenido por la policía en la madrugada de este martes tras el incidente que dejó inconsciente al juez y que obligó a la suspensión del partido entre su equipo y el Guaraní, disputado en Venancio Aires, municipio en el interior del sureño estado de Río Grande do Sul.
El suceso ocurrió en el minuto 14 del segundo tiempo, cuando el agresor discutió con el árbitro por una falta que supuestamente sufrió y que no fue sancionada.
Ribeiro tendrá que responder penalmente por intento de homicidio por la patada que le dio al árbitro Rodrigo Crivellaro, al que agredió cuando ya estaba en el suelo tras haberlo empujado violentamente después de un primer golpe.
Crivellaro, quien perdió la consciencia, tuvo que ser retirado en ambulancia del estadio Edmundo Feix y trasladado a un hospital municipal, donde su estado de salud fue calificado como estable este martes. El portal Gaúcho Informa lanzó más tarde imágenes del colegiado siendo retirado del lugar en silla de ruedas y con cuello ortopédico.
Ribeiro tendrá que permanecer en una penitenciaría mientras la Justicia decide si confirma su detención preventiva o si le permite responder al proceso en libertad.
"El ataque fue muy fuerte, violento, y en la cabeza del árbitro, lo que hizo que se desmayara y fuera llevado al hospital, por eso puede ser encuadrado por intento de homicidio", explicó Vinicius Assunçao, comisario de la Policía Civil de Venancio Aires.
"La víctima, además, no tenía condiciones de defensa. Ya había sido golpeado cuando estaba de pie y después cayó y quedó sin condiciones de defenderse. Podría haber muerto o hasta sufrido una lesión cerebral grave", agregó.
El club Sao Paulo de Río Grande condenó lo ocurrido en un comunicado y anunció la inmediata rescisión del contrato del futbolista detenido.
La Federación de Fútbol del Estado de Río Grande do Sul lamentó lo ocurrido y dijo que el caso también será juzgado por la Justicia Deportiva.
Ribeiro, de 30 años, ya tenía antecedentes por casos de violencia en los terrenos de juego. El delantero, que inició carrera en las divisiones juveniles del Internacional de Porto Alegre y ha pasado por varios clubes de la segunda división de Río Grande do Sul, fue expulsado en un partido en 2014 por dar un puñetazo a un rival en un partido entre el Guaraní, en el que militaba en esa época, y el Pelotas.
También fue acusado de agredir a un hincha en un episodio fuera de las canchas. Completito.