Mauricio Macri va buscando a los tumbos la táctica para hacerle frente a la indagatoria por el espionaje a los familiares del ARA San Juan. Después de haber pegado el faltazo a la primera convocatoria por estar en Miami, Hernán Lombardi, secretario de Movilización del PRO y candidato a diputado, salió a decir que el expresidente estará de regreso en el país el 19 de octubre próximo para presentarse al día siguiente ante el juez Martín Bava en los tribunales de Dolores. Los asesores legales de Macri, que trabajan en la estrategia del expresidente, se mostraron sorprendidos por la información y, por el momento, no terminaron de confirmar que efectivamente ésta vaya a ser la jugada de Macri.
Desde que Bava lo convocó a indagatoria por haberle ordenado supuestamente a la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) seguir a las familias de los submarinistas, Macri buscó esquivar la presentación en el expediente. Tras idas y vueltas, la delegación de Dolores de la Policía Federal Argentina (PFA) logró entregar la notificación 20 horas antes de la audiencia. La recibieron el secretario privado de Macri, Darío Nieto, y Juliana Awada. Las demoras fueron capitalizadas por el expresidente que estaba en Miami haciendo sociales y presentando su libro Primer Tiempo, en el que le dedica unas pocas páginas a contar cómo dejó la exSIDE en manos de su amigo Gustavo Arribas, un hombre leal, sin ningún tipo de formación en inteligencia pero acostumbrado a las trampas --según la descripción del exmandatario--.
Por las demoras, Bava debió reprogramar la indagatoria para el 20 de octubre. Hasta el momento, en el expediente, Macri no designó abogado, pese a que se sabe que la defensa la tomará Pablo Lanusse y que el exministro Germán Garavano también trabaja con él en la estrategia legal del expresidente. Durante el fin de semana, la idea que primaba entre los consejeros de Macri era estirar la presentación hacia finales de la semana próxima. Entonces, Macri nombrará a su letrado y tendrá acceso formal a la causa que se inició en septiembre del año pasado tras una denuncia de la interventora de la AFI, Cristina Caamaño.
“Se van a formular bastantes impugnaciones”, repiten cerca del expresidente. En primer lugar, los abogados quieren que la causa pase a los tribunales de Comodoro Py, un territorio siempre menos hostil para el macrismo. Allí el argumento que usarán es que la justicia de Dolores no puede investigar las órdenes que Macri supuestamente impartió desde la Casa Rosada. Ese argumento ya lo había ensayado Arribas el año pasado, cuando fue llamado a indagatoria por el juez Alejo Ramos Padilla por el llamado “Proyecto AMBA”. A Arribas le dio la razón el camarista Martín Irurzun y le ordenó al juez Ariel Lijo que reclamara la causa. Por ahora, Bava no respondió a ese requerimiento en el expediente que es conexo al del espionaje a los familiares del ARA San Juan.
No descartan tampoco recusar a Bava, el primer juez que avanzó en una indagatoria contra Macri. En el PRO miraban con atención una denuncia que presentaron abogados de represores por su actuación en un juicio por crímenes de lesa humanidad. En el Consejo de la Magistratura, esa presentación está en manos del vicepresidente del cuerpo, el juez Alberto Lugones, y no tiene elementos que puedan preocupar a Bava.
Que Bullrich de explicaciones
Está claro que, por un lado, actúan los asesores legales de Macri y, por otro, los integrantes de su espacio que salen en su defensa. En este último grupo se inscriben los dichos de Lombardi, que, en una entrevista con CNN Radio, confirmó que el expresidente iba a estar en la indagatoria del 20, mientras los abogados decían que no podían asegurarlo. El miércoles, la presidenta del PRO, Patricia Bullrich, mandó un mail al juzgado para avisarle a Bava que Macri no iba a volver al país hasta fin de mes.
El correo no tiene ninguna validez en el expediente, pero configura una respuesta política por parte del ala dura de Juntos por el Cambio que dice que la citación es política y describe a Dolores como un “juzgado anti-PRO”. También funcionó como advertencia al juez, a quien Bullrich le recomendó que no tomara decisiones apresuradas que solo aumentarían el estrépito mediático. En otras palabras, Bullrich estaba abriendo el paraguas por si Bava decidía declarar rebelde al expresidente y ordenar su captura. Los juristas lo veían como una posibilidad remota y prácticamente imposible.
Antes del feriado, la abogada querellante Valeria Carreras, que representa a familiares de los tripulantes, pidió que Bava digitalice la nota de Bullrich que se presentó como algo así como una “garante política” del expresidente. “Aprovechando que Bullrich se metió en esta causa, pediremos este martes que se la cite a brindar explicaciones”, dijo Carreras a Página/12.
En septiembre del año pasado, la querella había pedido a la justicia federal de Mar del Plata que investigara el rol que jugó una mujer que se ponía en contacto con las familias de los submarinistas para ganarse su confianza y se presentaba como secretaria de Bullrich. El contacto de esta mujer habría sido durante las primeras semanas de la desaparición del submarino, ya que dejó de comunicarse para febrero de 2018. “Tenemos mucho por investigar. No creemos que solo sean los hechos contenidos en los discos que dan origen a la denuncia de Caamaño, por eso pediremos y reiteraremos medidas de instrucción pendientes. Hay más hechos y hay más responsables”, insistió la abogada.
El viaje de Arribas
El exdirector general de la AFI pidió autorización para salir del país entre el 7 de octubre y el 28 de noviembre. En realidad, el viaje se extendería hasta el 8 de diciembre porque según dijo la defensa del escribano Aerolíneas Argentinas no tiene pasajes en días anteriores para regresar desde San Pablo hasta Buenos Aires. Arribas quiere ir a Brasil a ver a su hija menor y a Uruguay a visitar a sus hijos mayores. Bava le rechazó el pedido a Arribas. El juez resaltó que el exSeñor Cinco había viajado en cinco oportunidades al exterior en el último año pero que su situación había variado desde que lo procesó por el espionaje a los familiares del ARA San Juan y desde que citó a su amigo Macri, quien lo puso al frente de la exSIDE.
La defensa de Arribas apeló la decisión de Bava y espera que la Cámara Federal de Mar del Plata revierta la prohibición de salida del país. Según el abogado Jorge Sourigues, es “intrascendente” que se halle pendiente la declaración de otro de los imputados, aún cuando sea el expresidente, y no se comprende por qué ahora existiría riesgo de fuga cuando antes no lo había.
Por los hechos del ARA San Juan, Bava procesó a Arribas y a su número dos, Silvia Majdalani, que ya acumulan cuatro procesamientos. También dictó procesamiento contra el exdirector de Reunión Interior Eduardo Winkler, el exjefe de la base Mar del Plata Nicolás Iuspa Benítez y cinco agentes que reportaban en la delegación desde donde se llevó adelante la vigilancia sobre las familias.