La alcaldía de Chicago suspenderá desde la medianoche de este viernes a la mitad de sus policías por negarse a informar si se vacunaron contra el coronavirus. La medida tensa las relaciones entre parte de la fuerza y Lori Lightfoot, la alcaldesa de la ciudad con la mayor cantidad de asesinatos en Estados Unidos.
"No permaneceré de brazos cruzados mientras la retórica de los teóricos de la conspiración amenaza la salud y la seguridad de los residentes de Chicago y los socorristas", dijo la alcaldesa en un comunicado en el que instó a todos los trabajadores empleados por la tercera ciudad más grande del país a que revelen si fueron inmunizados contra la covid-19.
Además, acusó al jefe del sindicato de la policía local, John Catanzara, de "engañar deliberadamente" a los oficiales de policía "mintiendo sobre los requisitos de la política y afirmando falsamente que no habrá represalias si se niegan a seguir una directiva u orden de la Ciudad y el Departamento". Aquellos que se nieguen tendrán unos días de gracia para explicarse, pero se enfrentan a ser puestos en licencia sin goce de sueldo y finalmente despedidos.
Catanzara ha amenazado con emprender acciones legales, diciendo que el sindicato solicitará una orden de restricción temporal para impedir que los funcionarios apliquen el mandato. Sin embargo, el jueves por la noche, la ciudad de Chicago presentó una demanda judicial en su contra. "Ha engañado deliberadamente a nuestros oficiales de policía mintiendo sobre los requisitos de la política y afirmando falsamente que no habrá represalias si se niegan a seguir una directiva u orden de la Ciudad y el Departamento", afirmó Lightfoot.
La jefa comunal también señaló que la ley estatal y el contrato sindical prohíben que la policía de Chicago haga huelga. La alcaldesa acusó a Catanzara de "alentar una huelga ilegal y un paro laboral que tiene el potencial de socavar la seguridad pública y exponer a nuestros residentes a daños irreparables, particularmente durante la pandemia en curso".
Por su parte, Catanzara pidió a los 13 mil integrantes de la policía de Chicago que se mantengan firmes, bajo el argumento de que "no hay forma de que puedan mantener una fuerza laboral del departamento de policía al 50 por ciento de su capacidad o menos durante más de siete días sin que algo se mueva". También dijo que "la situación de no pago no durará más de 30 días".
Chicago, la ciudad con más asesinatos en Estados Unidos
La ciudad lidera en estos momentos una vez más la cifra de asesinatos a nivel nacional, con 639 hasta el miércoles último, 55 por ciento más que hace dos años, según datos del Departamento de Policía de Chicago. Los tiroteos crecieron a su vez un 68 por ciento respecto a 2019, llegando a 2866 este año hasta el 13 de octubre, según el Departamento de Policía de Chicago. Los robos de automóviles treparon a 1295 hasta el 7 de octubre, en camino a romper un récord histórico.
En ese contexto, la amenaza de perder gran parte de la fuerza policial, incluso temporalmente, ha causado una profunda sensación de malestar. El concejal Anthony Napolitano, un ex oficial de policía que apoya la postura del sindicato, señaló que la fuerza tiene hoy alrededor de mil oficiales menos debido a un número récord de jubilaciones y a la falta de nuevos reclutas. "Los criminales saben estas cosas, saben lo que está pasando", declaró el miércoles al Chicago Sun-Times. "Va a ser un puro cuerpo a cuerpo".
Pese a que las fuerzas de seguridad estuvieron entre los primeros grupos en tener acceso a las vacunas, la covid-19 fue la principal causa de muerte de oficiales de policía en 2020 y en lo que va de 2021, según datos del Down Memorial Page, que registra el número de agentes fallecidos. Uno de los predecesores de Catanzara, Dean Angelo, quien se desempeñó como jefe del sindicato entre 2014 y 2017, murió por coronavirus el martes pasado.