Los gobiernos de Paraguay y Argentina acordaron la conformación de una Comisión Relatora Internacional para el esclarecimiento de las muertes de las niñas argentinas Lilian Mariana Villalba y María Carmen Villalba, ocurridos hace un año en contexto de un operativo militar en el departamento de Concepción en Paraguay. La comisión estará integrada por científicos forenses de varios países y el Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF).

El canciller de Paraguay, Euclides Acevedo Candia y su homólogo argentino Santiago Cafiero se reunieron en el Palacio San Martín. En un comunicado conjunto los ministros remarcaron “la necesidad del trabajo común contra el crimen organizado y el narcotráfico, y acordaron profundizar la cooperación para el intercambio en el uso de tecnología y experiencias que refuercen la agenda de seguridad compartida".

En el comunicado los diplomáticos también reivindicaron la defensa de los derechos humanos “en ese contexto acordaron trabajar en el caso de las niñas muertas en la localidad de Yby Yaú". En este sentido, Cafiero y Candia se comprometieron en avanzar hacia la conformación de una Comisión Relatora Internacional integrada por científicos forenses de Portugal, España, Paraguay y el EAAF, "respetando la soberanía jurisdiccional del Paraguay", según dice el texto conjunto.

"Con el canciller del Paraguay trabajamos unidos para fortalecer el Mercosur y potenciar nuestra agenda bilateral. Gracias por tu cordial visita a la Argentina. Espero próximamente poder hacer lo propio", escribió esta mañana Cafiero en su cuenta de Twitter. Fuentes de la Cancillería argentina destacaron que se trata de "un gran logro diplomático en la búsqueda de la verdad y la justicia".


El 2 de septiembre del 2020, la Fuerza Tareas Conjunta (FTC), una célula del ejército paraguayo creado por el expresidente Horacio Cartes con el objetivo de perseguir y combatir el grupo guerrillero Ejército Paraguayo del Pueblo (EPP), anunció que había abatido a varios miembros de esa organización. El presidente Mario Abdo Benitez había presentado el operativo como exitoso. Sin embargo, luego se conoció que las víctimas del FTC fueron dos niñas argentinas: Lilian Mariana Villalba y María Carmen Villalba, de 11 años. Las niñas eran primas y vivían con la abuela en Misiones. A fines de 2019 viajaron a Paraguay para reunirse con sus padres por primera vez, pero no pudieron regresar al país por el cierre de fronteras a causa de la pandemia.

La familia y organismos de derechos humanos rechazaron desde el principio la versión oficial y denunciaron la destrucción de pruebas y la violación de protocolos de investigación. Dos meses después del ataque en el que murieron las dos niñas argentinas un uniforme de Human Rights Watch (HRW) reveló la existencias de “graves irregularidades”. Tanto HRW como la Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, exigieron una investigación urgente e imparcial del hecho.