Todo indica que la DAIA, la organización que nuclea a los clubes, sinagogas, escuelas e instituciones de la comunidad judía, apelará el fallo del Tribunal Oral Federal número 8 que sobreseyó a todos los imputados en la causa del Memorándum. El expediente tuvo a la DAIA como impulsor principal, en combinación con el gobierno de Mauricio Macri y los dos jueces de Casación, Gustavo Hornos y Mariano Borinsky, que visitaban a Macri en Olivos y Casa Rosada.
Esa trama no sólo logró la reapertura de la causa, de la mano del juez Claudio Bonadio, sino que llegó al punto de acusar a la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner y al canciller Héctor Timerman de traición a la patria, un delito que no se utilizaba desde 1955, cuando la llamada Revolución Libertadora acusó a Juan Domingo Perón. El sector más religioso de la comunidad judía afirma que está en contra de la apelación porque dice que no es función de la DAIA acusar a mandatarios o exmandatarios, tomando partido en este caso por Juntos por el Cambio. Sin embargo, según afirma la Agencia Judía de Noticias (AJN), estaría tomada la decisión de apelar el demoledor fallo, por unanimidad, de los jueces Gabriela López Iñiguez, Daniel Obligado y José Michilini, que consideraron que no existe delito en la causa del Memorándum de Entendimiento con Irán.
Encuentro en la DAIA
La conducción de la DAIA convocó para el martes a una especie de plenario consultivo de las organizaciones de la comunidad judía. Lo que se decida en el encuentro no será vinculante, pero según el órgano comunitario AJN, la decisión estaría tomada. Por de pronto ya hubo presiones de expresiones de derecha, tanto de la Coalición Cívica como de la española Pilar Rahola, reclamándole a la DAIA que apele el fallo sobre el Memorándum.
La ortodoxia religiosa, que conduce la mutual AMIA, se pronunció en contra de que se siga insistiendo en un expediente que, según entiende, es únicamente político y sin sustento alguno. Hay otros clubes y sectores comunitarios que también están en contra de apelar, pero primaría la influencia del macrismo.
El peligro amarillo
En los últimos meses hubo un intento de armar una lista que algunos llamaron lista amarilla, en el sentido de expresar directamente al PRO, y que llevaba como candidato a presidente de la DAIA a Claudio Avruj, exsecretario de Derechos Humanos de Macri. Sin embargo, el intento de alianza de Avruj con la corriente del rabino Sergio Bergman no pudo concretarse y la lista no se presentó. Eso le dejó abierto el camino al actual presidente Jorge Knoblovits para renovar su mandato. En la nómina hay un representante del sector ortodoxo, por primera vez en la historia.
Por fuera de la DAIA, el Llamamiento Argentino Judío -cuyo presidente es Marcelo Horestein y que tiene como referente a Jorge Elbaum- viene denunciando la alianza de la conducción comunitaria con Juntos por el Cambio y la semana pasada celebró el fallo del TOF 8. El Llamamiento fue aceptado por los jueces como amicus cureae, amigo del tribunal, y pudo presentar sus argumentos.
La DAIA y el judío traidor a la patria
La apelación del fallo no depende de la DAIA. Está claro que el fiscal Marcelo Colombo presentará un recurso ante la Casación y lo propio harán los dos familiares de las víctimas de la AMIA, Claudio Averbuch y Luis Czyzewski, ambos vinculados a conducciones de la derecha comunitaria. Sin embargo, la apelación de la DAIA tiene su peso porque durante la gestión de Ariel Cohen Sabán se reflotó la causa, de la mano de Macri, los jueces de Casación que lo visitaban, el juez Clarudio Bonadio y la propia conducción de la DAIA.
Uno de los episodios más graves fue la acusación de traición a la patria contra el primer canciller judío de la historia, Héctor Timerman. Sintonizaron así con el cliché antisemita: el judío traidor a la patria, que tuvo su episodio más grotesco con el caso Alfred Dreyfus en Francia, un militar judío acusado falsamente de traidor. Esta vez participaron de la acusación los propios dirigentes de la DAIA.
A Timerman no sólo lo defendieron sus abogados Graciana Peñafort y Alejandro Rúa, sino que hasta lo hizo el exsecretario general de Interpol, Ronald Noble. Pero incluso la central mundial de policías envió en octubre de 2020 la documentación que dejó en claro que el entonces canciller, al informar a Interpol de la firma del Memorándum, dejó constancia que el tratado no modificaba en nada las órdenes de captura contra los sospechosos iraníes de haber atentado contra la AMIA. De hecho -lo dice la misma Interpol- las alertas rojas no cayeron nunca y siguen vigentes hasta hoy. Esa documentación, más el hecho de que el Memorándum nunca entró en vigencia, fueron las bases del fallo de sobreseimiento de todos los imputados por inexistencia de delito.
El panorama judicial
El fallo del TOF8 será difícil de doblegar por la contundencia de los argumentos de los magistrados, que lo votaron por unanimidad. No obstante, el recurso llegará a la Sala I de la Casación. En un fallo firmado este viernes, los tres magistrados de esa sala, Daniel Petrone, Ana María Figueroa y Diego Barroetaveña, tomaron dos decisiones centrales:
- Rechazaron la recusación del fiscal Colombo, cuestionado por los dos familiares, Averbuj y Czyzewski, porque aceptó que se hagan las audiencias previas al juicio y en las que se expusieron dos hechos nuevos -las visitas a Olivos y Casa Rosada de los camaristas y la documentación de Interpol-, lo que derivó en los sobreseimientos. Colombo sostuvo que correspondía escuchar a todas las partes de manera pública en lugar de que las exposiciones se hicieran por escrito, de manera cerrada. En el fallo del TOF8 se expusieron otros 13 expedientes en que se dictaron sobreseimientos sin necesidad de realizar el juicio. La Casación entonces confirmó a Colombo, quien ya ha hecho saber que apelará el fallo del Memorándum.
- Pero también la Sala I confirmó que será esa sala la que resolverá todo lo referente a esta causa, desplazando de manera definitiva a la Sala IV, la de Hornos y Borinsky, Esos magistrados de la Sala I, que constituyen una sala que para nada es afín al kirchnerismo, tienen el antecedente de haber sobreseído a todos los imputados del caso dólar-futuro sin realizar el juicio. Y, además, se hicieron audiencias públicas en que las partes -lo hicieron Cristina Kirchner y Axel Kicillof, por ejemplo-ejercieron su defensa.
De cualquier manera, la lógica indica que el expediente Memorándum terminará en la Corte Suprema de Justicia. Eso seguramente tardará tiempo y habrá que ver quiénes son los integrantes en ese momento. Hoy por hoy -según rumorean- se impondría el criterio de que el Memorándum fue una decisión política, no judiciable. En cualquier caso, en el corto plazo hay una apelación de algunos de los imputados porque el TOF8 no le puso costas a la DAIA y en el horizonte están las acciones civiles por indemnizaciones a raíz del tiempo en la cárcel de varios de ellos, la afectación de la salud de Timerman y los perjuicios por una denuncia que fue originalmente de Alberto Nisman pero que sin los querellantes no se hubiera reabierto.