A poco menos de un mes para las elecciones generales que definirán los tres diputados Nacionales por Salta, el candidato del Frente de Todos, Emiliano Estrada, encara este último tramo de la campaña entre el interior y la capital provincial con el mismo slogan que comenzó, el de proponer una Salta productiva, y para eso dice saber cómo, ya que incluso escribió un libro al respecto.
Si bien la distancia obtenida en las primarias le alcanzaría para volver a quedarse con el primer puesto el próximo 14 de noviembre, sabe que debe ir a buscar los votos en blanco, los indecisos y los que en las últimas elecciones directamente decidieron no participar, y que en su mayoría representan a la juventud. Por eso se enfoca en hablarle a ese sector “para que sepan que tenemos propuestas concretas y que hay alguien que los escucha”.
Resaltó que hay que pensar en Salta sin quedarse en las discusiones de campaña de Buenos Aires, “que nada tienen que ver con lo que nos pasa acá”, pero sin desconocer que en materia político y económica “somos parte de un país, y las decisiones nacionales siempre repercuten”. Por eso aseguró que seguirán caminando la provincia “para hacer escuchar uno a uno la propuesta que tenemos” y buscar quedarse con al menos dos de las tres bancas en juego.
- ¿Cómo arrancó esta nueva campaña de cara a las generales?
- Nosotros tenemos un esquema que va de lunes a jueves en el interior y de viernes a domingo en Capital. Esta semana estuvimos en San Antonio de Los Cobres, en Güemes y muchas otras ciudades del interior, porque nuestra campaña está encarada desde la idea de pensar una Salta productiva y tiene que darse desde el interior, porque esta provincia tiene una configuración muy parecida a la de la Argentina tanto desde su estructura económica como también desde las intenciones de voto.
Pero vemos que tiene buen impacto, porque mucha gente por donde voy me dice que no sabían que por ejemplo en Pizarro se hace berenjena, u otro tipo de producciones en otros lugares. Y nosotros queremos visibilizar todos esos sectores, porque en la primera parte de la campaña tuvimos una mirada de plantear cuáles eran las obras centrales en términos estratégicos para tener una Salta productiva desde el punto de vista de la discusión del presupuesto nacional.
Pero ahora estamos en una etapa de avanzar con pequeños productores y empresarios, que va desde la necesidad de realizar un tendido eléctrico de tres kilómetros que necesitan en Pizarro, al que necesitan desde la ruta de San Carlos hasta la entrada del matadero municipal. Es la parte más chica pero que le resuelve un montón las cosas a muchas localidades y su gente. Porque por ejemplo ese centro de faena va desde Payogasta hasta Cafayate y va a ser el único matadero municipal al que van a poder acceder productores caprinos, bovinos y otros.
También estuvimos en Vaqueros con Miguel Calabró viendo la instalación de una balanza para pesar el ganado, y de esa manera no lo tengan que vender por unidad sino por kilos.
Todo eso es lo que estamos viviendo en esta segunda etapa de campaña, que para nosotros también es un aprendizaje, el de ir y conocer cada necesidad del interior profundo.
A diferencia de otras listas y otros candidatos, nosotros estamos recorriendo absolutamente todos los días para incorporar todas las demandas y también para resolver mucho lo que pasó en las primarias, el voto en blanco y el que no fue a votar, que es porque la política no lo está logrando interpelar o su agenda no lo toca en lo cotidiano.
Eso mismo nos pasa con los jóvenes, que permanentemente te dicen que nadie les habla, nadie los interpela y no son protagonistas de nada. Por eso queremos hablarles a ellos, planteándoles que a mí me tocó ser ministro a los 31 años y uno nunca está preparado para ocupar un cargo así, sino que se aprenden en el marco de la formación, la experiencia y la visión, para luego ponerlo en práctica. Y en eso hay que ser claros y generarles interés, para que entiendan que ellos tienen que ser protagonistas y comenzar a hacer la historia, porque son el presente y el futuro.
Cuando nosotros decimos que queremos hacer las cosas diferentes en nuestro spot de campaña es porque estamos hablando con los actores de la economía, que son muchos, y porque hay que entender que Salta es diferente desde su identidad productiva. Yo no puedo hablar de la industria automotriz, cuando no hay ninguna en la provincia.
Sin embargo de un mercado laboral de alrededor de un millón de personas, entre el sector privado y el público llegás a las 250.000, por lo que quedan más de 700.000 en otra conceptualización, que es la del autoempleo, el autónomo, o la economía social o barrial, que requiere una planificación distinta, y para eso hay que plantear discusiones diferentes a las que tenemos desde hace 40 años y con sectores invisibilizados.
La otra es plantear por ejemplo propuestas como el monotributo joven, porque queremos que se inserten en el mercado laboral pero el mercado no tiene lugar para absorberlos a todos, por eso una de las salidas es que puedan emprender, ser autónomos para que tengan al menos una oportunidad y apoyarlos sin que tengan que pagar el monotributo al menos por un año.
- ¿Cree que en esta instancia va a recuperar votos de personas que no fueron a votar en las PASO?
- Sí, de los dos lados. Los que solamente construyen en base al odio y no a propuestas también van a lograr movilizar gente que no participó en septiembre. El otro día escuchaba a Patricia Bullrich con Martín Grande decir “le vamos a romper el quórum al kirchnerismo”, porque están a cinco senadores. Y lo que está diciendo es que hay que votar solo por odio, no por una alternativa de Argentina ni con propuestas concretas.
Ellos apuestan a activar con esos métodos, nosotros con propuestas, porque siempre nuestro espacio construyó desde el amor. Hoy (por ayer) justo es 17 de octubre, qué otra expresión de amor que el de la Lealtad, porque nuestro espacio le dio al obrero la posibilidad de estudiar o de veranear en cualquier lugar del país, o acceder a una jubilación.
- ¿Cómo influye lo nacional, las críticas que recibe el gobierno en lo local?
- Bueno, en Salta Capital es mucho más marcada esa grieta por la influencia de los medios de Buenos Aires. Pero en el interior no, ahí hay una idea más práctica, y que tienen que ver con los problemas cotidianos y que necesitan resolver para vivir. Por eso lo que se discute en esos medios no les llega tanto, si lo que necesitan es un tendido eléctrico para aumentar la producción de berenjenas y desde el centro del país hablan de otras cosas. “El que me hable sobre resolver esos, que son mis problemas, recibirá mi atención”, es lo que dicen y con razón.
En Palermo, o Payogasta, los productores viven el día a día en el medio de los cerros y necesitan que se piense en ellos y sus problemas, y no en los problemas de Ciudad Autónoma o el que tienen los que conducen un programa de tele nada más.
Porque por ejemplo, cuando (Javier) Milei te habla de quemar el banco central o Juntos por el Cambio sale con sus medidas liberales que son inaplicables, no tienen nada que ver con el sistema productivo de nuestra provincia. En Orán, por ejemplo, Abra del Sol no es más grande porque el puente ferroviario del Río Colorado está caído hace cuatro años y la ruta está en malas condiciones. Ahí tenemos que apuntar, no a lo que se discute en Buenos Aires.
- De todas maneras usted es parte de un proyecto nacional
- Sí, totalmente, somos parte de un proyecto, pero esto lo conversé con Wado (de Pedro) también, y que es la idea de no ir diciendo que somos los representantes del gobierno nacional el Salta, o que vamos a conseguir cosas, sino plantear que el desafío, si me toca ser diputado es sentarme en una mesa de discusión nacional y llevar la visión y cosmovisión de los salteños.
Pero sí quiero cortar con la visión que la Nación es una cosa y la provincia otra, porque el país está compuesto por 23 provincias y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, y entre esas está Salta, por lo que la Nación somos nosotros, y el gobierno también. Por lo que tenemos que discutir para donde va la Argentina, que también es Salta, y con una mirada puesta en nuestra región.
- Usted fue ministro de Economía de la provincia, lo conoce a Martín Guzmán, que estuvo con usted al inicio de la campaña ¿Cómo ve la renegociación de la deuda? Y a la vez ¿cómo se resuelve el tema de la inflación, que también influyó en el voto?
- Creo que hay que llegar a un acuerdo que sea cumplible. La diferencia entre los gobiernos peronistas de los gobiernos antiperonistas, porque no hay otra fuerza política, sino que se articulan alrededor del odio al peronismo. Es que nosotros somos la fuerza política con mayor responsabilidad institucional del país, a diferencia de lo que han instalado. Perón no permitió que el pueblo se arme para evitar una sangría en el primer golpe, y en la crisis del ´89 fue el peronismo el que reconstruyó eso, al igual que en el 2001. Y ahora estamos en ese camino de nuevo.
Pero además, a la hora de gobernar tenemos una responsabilidad institucional que es firmar el mejor acuerdo posible con el Fondo. Podríamos haber dicho después del resultado de las PASO “andá a firmar lo que sea y que después del 2023 vean”. Pero no, vamos a buscar que no se tenga que volver a negociar nada ni en el 2023, ni en el 2024, cuando Cambiemos firmó un acuerdo que lo modificó tres veces en seis meses, un desastre lo que hicieron. Sin pensar que el Estado tiene continuidad sin importar quién gobierne, y eso a nosotros sí nos importa.
Ahora, una vez que lleguemos a ese acuerdo, lo que tenemos que lograr es una discusión de orden federal en términos productivos, y no quedarnos enredados en una agenda del área metropolitana de Buenos Aires. Tenemos que entender la estructura productiva del interior del país, y no tratar de resolver los problemas de inflación sentándose con un solo sector como puede ser la Unión Industrial y demás, sino incluir a todos los sectores, que por ahí no tienen tanta representación en términos de Producto Bruto Interno pero sí en cantidad de actores, productores y Pymes.
Esa es una parte de la etapa que nos falta a la política antiinflacionaria para que tenga arraigo territorial, porque sino solo lo queremos resolver con cinco entidades en Buenos Aires y no tiene capilaridad en el interior.