"Para Francisco con mucho cariño." El mensaje fue del capitán de la Selección Argentina, Lionel Messi, pero llegó escrito y firmado sobre la camiseta 30 del Paris Saint German, la que usa el astro desde este semestre cuando saltó del Barcelona a la Ligue 1. El pontífice recibió la casaca autografiada de manos del primer ministro francés, Jean Castex.
Castex mantuvo una reunión de 35 minutos en la Biblioteca Privada del pontífice en el segundo piso del Palacio Apostólico del Vaticano. El encuentro, en la previa al colorido dato de los regalos, fue por un tema crítico que Francisco intenta abordar desde su llegada al Vaticano: los casos de abusos de menores de edad por parte autoridades eclesiásticas.
El 5 de octubre, un informe independiente reveló que, desde 1950, 216.000 chicos y adolescentes fueron víctimas de abusos sexuales en Francia por parte de sacerdotes. "El discurso del papa consiste en decir que ha sido valiente la Iglesia en Francia por haber hecho su trabajo. Está satisfecho porque no lo han negado", sostuvo Castex al salir del encuentro privado.
Entonces, llegó el momento de color, el intercambio de regalos. Entre los que llevó Castex pasó inadvertida la edición de 1836 de "Notre Dame de Paris", de Victor Hugo, porque toda la atención quedó concentrada en el regalo que llegó de puño y letra de la flamante estrella del fútbol francés y 10 de la Selección Argentina.
No es la primera vez que el Papa recibe una camiseta autografiado por el rosarino. En 2017, el entonces vicepresidente primero del Barcelona, Jordi Cardoner, le entregó una camiseta del club catalán con la firma de su ya histórico capitán. Además, la selección subcampeona del mundo en Brasil 2014 también le envío una casacasa autografiada.
Un año antes, en agosto de 2013, Messi y la delegación de la Selección Argentina visitó a Francisco en el Vaticano antes de un amistoso ante Italia en el Olímpico de Roma, organizado para recaudar fondos para Scholas Occurrentes, una fundación creada por Francisco.
