Un día después de que el Obispo diocesano de Catamarca, Luis Urbanc, dijera que la Ley de Educación Sexual Integral, “deforma a las nuevas generaciones”, la Pastoral Social difundió un comunicado de fuerte intromisión política con mensajes a los candidatos y a la población votante, a quienes mencionan como “hermanos catamarqueños”.
Entre las exigencias del documento, piden que "todos los candidatos expliquen qué proyecto tienen para resolver el cuidado de la vida desde su concepción hasta su disolución natural”.
“Exhortamos y alentamos a nuestros hermanos catamarqueños a poner nuestros ojos en el Bien Común, que implica y exige la tarea de los legisladores para ser protegido y promovido”, señala el documento.
De lleno en la campaña de las elecciones de noviembre, observan: “Será otro momento muy importante para la vida y destino institucional de nuestra Patria. Será también un momento y una instancia muy grave y delicada porque lo que sucederá en las urnas lo decidiremos nosotros, estará en nuestras manos”, oficia el escrito.
La impronta urbaniana suma hostilidades en el clero y en la política. Frescas en la memoria catamarqueña subsisten las recientes declaraciones de Urbanc, cuando en julio de este año se animó a declarar “demos gracias a Dios por la pandemia. El mundo la necesita. El tesoro es Dios, no la vacuna”.
Empoderada en la fe que profesa gran parte del pueblo de Catamarca por su devoción a la Virgen del Valle y al recientemente beatificado Fray Mamerto Esquiú, la Diócesis intenta avances en la vida política: “El próximo 14 de noviembre se llevarán a cabo las elecciones de los nuevos legisladores en el nivel nacional, provincial y municipal”, señalan. En el escrito, que ensaya un análisis al estilo de una consultora electoral, expresan su preocupación por la merma en la concurrencia electoral de las PASO: “¿Qué pasó? ¿Por qué sucedió? Los analistas políticos y los encuestadores señalan varias causas: pandemia, mal humor social, desinterés, una forma de protesta, etc. Es posible que muchas tengan su cuota de razón”, estudian.
“Sin embargo, exhortamos y alentamos a nuestros hermanos catamarqueños a poner nuestros ojos en el Bien Común, que implica y exige la tarea de los legisladores para ser protegido y promovido. Y, ya que a esos legisladores los elegimos nosotros, pongamos atención y mucho cuidado para que después no nos tengamos que lamentar de haber tirado el voto a la ventolera”.
En las elecciones de 2019, el mismo sector realizó una campaña publicitaria con fotos de urnas, publicadas en los medios de comunicación provinciales llamando a no votar a quienes se expresaran a favor de la interrupción voluntaria del embarazo.
Exigencias
La vehemencia del discurso exhorta: “En asunto tan importante para el Bien de nuestra Patria, lejos de nosotros lavarnos las manos. Es un derecho y un deber de los ciudadanos. Y, frente a este derecho-deber se alza de nuevo la figura del Beato Mamerto Esquiú, para señalarnos, casi exigiendo: “¡Obedezcan, Señores!”. “Vayan a votar, y, ¡¡¡con responsabilidad!!!, Señores”.
Una vez más, la intimación política refiere: “A todos los Candidatos les pedimos que nos digan claramente qué proyectos tienen para resolver la pobreza, la falta de trabajo, la inseguridad, la educación, el narcotráfico, la megaminería, el medio ambiente y el cuidado de la vida desde su concepción hasta su disolución natural”.
A los ciudadanos piden: “Nuestra Patria lo espera, nuestra Patria lo necesita”. Mientras que “A la Madre del Valle, a San José y al Beato Mamerto Esquiú, les rogamos que nos consigan la luz que necesitamos”.
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