El juez Martín Bava debe decidir si declara en rebeldía y ordena la detención de Mauricio Macri después del pedido que hizo una de las querellas tras su decisión de no presentarse a la indagatoria que estaba fijada para este miércoles por el espionaje a los familiares de los tripulantes del ARA San Juan. Las definiciones deberían conocerse en las próximas horas.
Bava recibió una serie de pedidos en la mañana de este miércoles. Por un lado, la abogada Valeria Carreras, que encabeza la querella mayoritaria de familiares de los submarinistas, le reclamó a Bava que declare en rebeldía a Macri y ordene su detención por su reticencia a comparecer. Por otro lado, el abogado de Macri, Pablo Lanusse, recusó al juez y pidió que se postergue la indagatoria hasta tanto se resuelva la recusación.
Como primera medida, el juez va a tener que responder al planteo de Macri que busca apartarlo de la causa con duras críticas. “Se encuentran rotas en cabeza del Senor Juez recusado las condiciones esenciales que distinguen al juez imparcial frente al caso concreto: el equilibrio, la templanza, la ecuanimidad, la limitación jurisdiccional y la distancia anímica de no involucramiento persona”, escribió Lanusse.
Todo indica que el magistrado rechazaría la recusación en las próximas horas, y allí debería resolver si fija una nueva fecha para que comparezca Macri o si toma el camino que le indica la querella y ordena que comparezca por la fuerza pública. “No es posible que el juez haga eso. La querella está mal asesorada”, responde uno de los abogados que asesoran al expresidente ante una consulta de PáginaI12.
En el macrismo, hay tranquilidad porque toman como caso testigo la convocatoria a indagatoria que cursó Bava contra el intendente de Pinamar, Martín Yeza, cuya citación ya se aplazó en tres oportunidades. Sin embargo, siempre sobrevuela el fantasma de Fabián “Pepín” Rodríguez Simón, el poderoso asesor de Macri en materia judicial que se escapó a Uruguay para no presentarse a la indagatoria ante la jueza María Servini por las presiones a los dueños del Grupo Indalo.
“El juez debería rechazar la recusación y fijar una nueva fecha”, apunta un magistrado de otra jurisdicción ante la consulta de este medio. En el escrito, Lanusse le advierte que pueden llegar con su recusación hasta la Corte Suprema y que, si convocara a Macri nuevamente a indagatoria mientras ese incidente no se resolvió, reclamarán que todo lo actuado sea declarado nulo.
Una vez que Bava responda al planteo de Macri, la defensa de Macri llevará el tema a la Cámara Federal de Mar del Plata. En caso de que los camaristas respalden a Bava, el tema irá a la Cámara Federal de Casación Penal. Allí el interrogante será si interviene la sala que tiene asignada la causa madre de todas las causas de espionaje que tramitan en Dolores, el D’Alessiogate. En ese expediente, los camaristas que entienden son Eduardo Riggi, Guillermo Yacobucci y Javier Carbajo después de una serie interminable de recusaciones y excusaciones.