La tragedia ocurrida en el rodaje de la película Rust, que conmueve al mundo del espectáculo, trajo el recuerdo de un caso similar que ocurrió con un actor argentino mientras grababa una tira para Telefé, a principios de los 90.
Se trata de César Pierry, un joven actor, que saltó a la fama luego de protagonizar Detective de señoras, junto con Fernando Lúpiz, Ricardo Morán, Stella Maris Lanzani y Luisa Albinoni.
Murió en 1992, cuando en medio de la filmación de los capítulos que se emitirían más tarde bajo el nuevo nombre de la tira, Mi socio imposible, un artefacto explosivo le detonó en sus manos.
Tenía 37 años cuando grabó la que sería su última escena, el 20 de julio de 1992. El guión marcaba que Pierry debía sostener una granada pero el explosivo estalló antes de tiempo en la mano del actor oriundo de La Plata.
La explosión provocó la amputación de tres de sus dedos y la pérdida del sostén esquelético de los otros dos. Debió ser sometido a múltiples cirugías. En la cuarta operación, que duró siete horas, el actor sufrió un paro cardiorrespiratorio y murió.
En su momento, hubo quienes señalaron mala praxis por parte de los médicos que lo atendieron en el Hospital Británico, quienes habrían confundido la medicación o se habrían sobrepasado a la hora de anestesiarlo.
Pierry había compartido escenario y pantalla con grandes celebridades como Pepe Cibrián, Antonio Gasalla, entre otros.