La isla atlántica española de La Palma, donde el volcán de Cumbre Vieja permanece en erupción desde el 19 de septiembre, registró este sábado un terremoto de 4,9 de magnitud a 38 kilómetros de profundidad, sentido por la población.
El temblor, detectado por el Instituto Geográfico Nacional (IGN), es el mayor desde que comenzó el enjambre sísmico que precedió a la erupción y durante el tiempo que dura esta.
Desde que a primera hora de este sábado se registrara un terremoto de 4,3, el IGN ha localizado 30, de los cuales una decena superó la magnitud 3.
El cono principal del volcán se ha derrumbado parcialmente -según el Instituto Volcanológico de Canarias, archipiélago del Atlántico donde se encuentra La Palma-, y un sismógrafo del IGN informó de una emisión de coladas más al oeste del cono secundario, que en las últimas horas sufrió varios desbordes de lava.
"De nuevo en La Palma para apoyar a la isla. El martes modificaremos en #CMin el Fondo de Contingencia para acelerar la llegada de las ayudas aprobadas y solucionaremos las demandas de los autónomos. Estamos con las y los palmeros ahora y seguiremos estando cuando acabe la crisis", señaló el presidente de España, Pedro Sánchez, a través de su cuenta de Twitter.
Los derrames han ensanchado la colada que más preocupa en estos momentos, la que se ha quedado parada en el barrio de la localidad de La Laguna, con riesgo para edificaciones y cultivos.
Hasta el momento, el volcán ha arrasado cerca de 900 hectáreas y ha destruido unas 2.200 edificaciones, muchas de ellas viviendas, según datos del sistema de satélites Copernicus. Además, unas 7 mil personas tuvieron que ser desalojadas desde el comienzo de la emergencia