El atleta ecuatoriano Alex Quiñónez, uno de los mejores velocistas del mundo, murió tras ser atacado a balazos en un suburbio de la ciudad de Guayaquil en un crimen que aún no fue esclarecido y generó una gran conmoción en el atletismo.
Quiñónez, finalista de los 200 metros en los Juegos Olímpicos de Londres 2012 y medalla de bronce en el Mundial de Doha 2019, fue asesinado cerca de la medianoche del viernes cuando estaba cerca de su domicilio acompañado de un joven, quien también falleció, señalaron fuentes policiales según la agencia de noticias AFP.
"Sentimos mucho la dolorosa pérdida de Alex Quiñónez, padre, hijo, un gran velocista que marcó el deporte. Nuestras más sinceras condolencias a sus seres queridos. Que en paz descanse. Quienes arrebatan la vida de los ecuatorianos no quedarán impunes. Actuaremos con contundencia", expresó el presidente de Ecuador, Guillermo Lasso, a través de su cuenta de Twitter.
El asesinato de Quiñónez, de 32 años, se produjo en medio de un estado de excepción decretado recientemente por Lasso para combatir la inseguridad que se desató en el país (se cuentan cerca de 1.900 muertes violentas en lo que va del año a causa del narcotráfico), con labores conjuntas entre la Policía y las Fuerzas Armadas.
"Con profundo dolor confirmamos el asesinato de nuestro deportista Alex Quiñónez. Perdimos a un gran deportista, a una persona que nos hizo soñar, que nos hizo emocionar", comunicó el ministerio del Deporte ecuatoriano.
Quiñónez, campeón panamericano en Lima 2019, no había podido participar de los Juegos de Tokio 2020 por una sanción de la Federación Internacional de Atletismo por no notificar correctamente su paradero para los controles antidoping fuera de competición. El Tribunal Arbitral del Deporte (TAS) le denegó una suspensión cautelar de la sanción de un año cuando el deportista aguardaba en la villa olímpica.
El Comité Olímpico Ecuatoriano (COE) manifestó que "la sorpresiva partida del medallista de bronce del último Mundial de Atletismo en Doha 2019 deja un profundo dolor, pero su legado como el más grande velocista de nuestra historia permanecerá siempre en nuestros corazones".
Quinónez, que planeaba ir a una base de entrenamiento en Estados Unidos con miras al Mundial de Oregon en 2022, también formaba parte del equipo de atletismo del FC Barcelona de España desde 2018. La entidad catalana se declaró de luto y expresó por Twitter "su sentido pésame por el asesinato".
La Organización Deportiva Panamericana (Odepa) también publicó un mensaje en su cuenta de Instagram: "Jamás te olvidaremos querido Alex, descansa en paz".