"La primera evaluación que hacemos es buena. Hay un informe muy preciso de la Defensoría del Pueblo donde plantea un cumplimiento bastante amplio, con 75 por ciento de los productos cumplidos en más del 60 por ciento de los comercios que relevaron", aseguró este domingo el secretario de Comercio Interior, Roberto Feletti, al analizar la implementación del plan de congelamiento de precios de 1432 productos.
El funcionario destacó además los controles que llevaron adelante las intendencias y aseguró que el lunes "vamos a intervenir más puntualmente en aquellos casos en que se haya incumplido. Se que hubo algunas clausuras y se que hay otros casos de minoristas que presentaron boletas de mayoristas por encima del precio. Por eso estamos teniendo esta semana una reunión con algunos mayoristas, pero si vos me preguntás el inicio del plan, que siempre requiere un período de adaptación, está siendo bueno. Hay retroceso de precios y eso es lo que se estaba buscando"
Según precisó Feletti, su cartera ya mantuvo reuniones con algunas de las grandes empresas que no acompañaron la medida como Molinos Río de la Plata y Unilever, aunque faltan otras como Quilmes. “Estamos ahora dialogando con las grandes empresas por el abastecimiento y el retroceso de precios y vamos a ir monitoreando el programa de acá a un mes”, detalló en declaraciones radiales.
Esta intervención, sostuvo el funcionario, "tiene un objetivo de corto plazo, que es bajar la fiebre, ya que la remarcación de octubre se volvió insostenible. Y el de largo plazo es asegurar una canasta básica regulada para la población argentina, con precios administrados y sin sobresaltos".
Feletti también aseguró que el ministro de Economía, Martín Guzmán, respaldó la medida y “coincidió en la visión de que hay una elite que no asume la necesidad de un país viable e integrado".
Consultado sobre el rechazo de la oposición al congelamiento, que en sintonía con algunos sectores empresarios insistieron con que podría llevar hacia el desabastecimiento, explicó que “esto es un control de precios, una armonía social por unos días para asegurar una canasta al pueblo argentino”.
"El modelo de país tiene que contener industria y política alimentaria", apuntó. En ese sentido, contrastó con el modelo de gobierno de Mauricio Macri, que "fue un fracaso porque tenía plata y apoyo institucional y la chocaron en la primera vuelta". "Si la macro no se estabiliza vamos a tener menos herramientas. Si cada peso va a parar al dólar y de ahí a una cuenta afuera no hay Argentina que aguante", añadió el funcionario.
Por último, el secretario de Comercio Interior negó que en el Gobierno exista un sesgo antiempresarial. "Son los empresarios que tenemos, pero también tienen que ser conscientes de que tiene que haber un proceso de armonía social que permita la expansión del consumo, que se produzca más, se estabilicen los precios y se logre mayor oferta", concluyó.
Reunión del Consejo Federal de Comercio Interior
Feletti participará este lunes por la mañana de una reunión del Consejo Federal de Comercio Interior (Cofeci), junto con sus pares de todas las provincias, y mantendrá a partir de las 14 un encuentro con las asociaciones de consumidores, para coordinar las formas de controlar el cumplimiento de la canasta de 1.432 productos con precios retrotraídos a los valores vigentes al 1 de octubre pasado. El acento en los controles se reforzó luego de que algunos sectores empresarios y dirigentes de la oposición advirtieran sobre un posible desabastecimiento.
El 13 de octubre, el mismo día en que Feletti anunció la canasta de productos que estará vigente hasta el 7 de enero próximo, la Copal, la entidad que nuclea a las firmas del sector alimenticio, ya había adelantado que "las políticas de congelamiento de precios no logran resolver los desequilibrios macroeconómicos que dan origen a la inflación" y que "resultan insostenibles ya que afectan el largo plazo para la continuidad productiva, dado que lleva a las empresas a producir a pérdida por no atender los innumerables aumentos de costos que viene afrontando el sector".
Ante este contexto, el Gobierno decidió sumar a provincias, intendencias y asociaciones de consumidores a un esquema de monitoreo para supervisar el cumplimiento de los precios máximos y el abastecimiento en comercios y supermercados.