Por un incipiente brote de coronavirus, decenas de miles de personas se encuentran confinadas en la zona norte de China. Las autoridades también restringieron el acceso a los lugares turísticos y aconsejaron a los residentes que limitaran sus movimientos a las actividades esenciales.
Aunque se trata de un brote de pequeñas dimensiones en comparación a las cifras de otros países --con 39 nuevos casos este lunes y más de 100 en la última semana, la mayoría relacionados con los movimientos de un grupo de turistas-- el gobierno decidió aplicar su política de "tolerancia cero" hacia el virus, mediante restricciones y campañas de detección masiva en las regiones afectadas.
En una rueda de prensa, el viceministro de Publicidad, Xu Hejian, señaló que cualquier persona proveniente de una zona donde se hayan identificado casos de covid-19 en las últimas dos semanas deberá presentar un test negativo.
También está restringido el acceso a los parques, teatros, cines y museos, que no podrán superar el 75% de su capacidad, además de salas de mahjong.
Beijing News, por su parte, confirmó que 23.000 personas de un complejo de viviendas del distrito de Changping fueron confindas en el interior de sus casas tras detectar 9 casos en los últimos días.
En las fotos distribuidas por el mismo medio se podía ver a empleados públicos con uniformes especiales vigilando las entradas de cada bloque de departamentos, mientras el perímetro del barrio estaba bloqueado por barricadas de metal.
La maratón de Wuhan
En la ciudad de Wuhan, donde se detectó por primera vez el coronavirus a finales de 2019, los organizadores de una maratón cancelaron el domingo pasado la competición en la que se esperaba la participación de más de 26.000 corredores, por temor a un aumento de los casos antes de los Juegos Olímpicos de Invierno, que se celebrarán el próximo 4 de febrero.
El comité organizador, que explicó que la decisión se tomó "para evitar el riesgo de una propagación pandémica", adelantó que reembolsará el costo de la inscripción a los participantes que se hubieran anotado al evento.
Gracias a la campaña de testeos, estricto control de fronteras y cierres tempranos, China ha reducido casi por completo los contagios del coronavirus. Desde el comienzo de la pandemia, según los datos oficiales, el país acumuló 109.197 casos y solo 4849 decesos.