Israel aprobó la construcción de más de 3.000 nuevas casas en asentamientos en Cisjordania. Apenas hace un día el gobierno estadounidense emitió su condena más fuerte contra la colonización israelí de tierras reclamadas por los palestinos con un pedido del canciller de Estados Unidos, Antony Blinken, al ministro de Defensa israelí, Benny Gantz, para que cancele la aprobación del plan.

El comité de planificación del ministerio de Defensa israelí aprobó este miércoles la construcción inmediata de 1.344 viviendas. También dio el visto bueno para la edificación a futuro de otras 1.800 casas, que se aprobaría en los próximos días. El Departamento de Estado instó a Gantz para que cancele la reunión para aprobar el plan. Blinken le advirtió al ministro de Defensa israelí que si la decisión de continuar con los asentamientos avanza se encontraría con respuesta severa desde Estados Unidos, según consigna el diario israelí Haaretz.

El gobierno israelí está conformado por una coalición liderada por nacionalistas pero también integrada por partidos de centro e izquierda que se oponen a la colonización. La decisión de avanzar con los asentamientos eleva las tensiones dentro de la gestión gobernante. Además, contradice las recomendaciones del gobierno de Biden que el martes se manifestó “profundamente preocupado” por los planes de Israel de expandir sus colonias en Cisjordania.

Un "no" rotundo

“Nos oponemos fuertemente a la expansión de los asentamientos, lo cual es completamente inconsistente con los esfuerzos de rebajar las tensiones para asegurar la calma y daña las perspectivas de una solución de dos estados", dijo el vocero del Departamento de Estado, Ned Price, a periodistas que advirtieron que se trataba de la “declaración más fuerte” emitida por el gobierno estadounidense respecto a los asentamientos israelíes.

Por su parte, el presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Mahmud Abas, condenó la aprobación por parte de Israel de la construcción de más de 3.000 nuevas viviendas en colonias de Cisjordania ocupada. Para Abas, la medida "empuja las cosas hacia un estado de inestabilidad y tensión".

En un comunicado oficial de la ANP, el presidente palestino señaló que este tipo de decisiones unilaterales "destruyen lo que queda de la solución de dos Estados" y "menosprecian los esfuerzos del Gobierno estadounidense". Además, exigió una respuesta “decisiva” de la comunidad internacional. Las declaraciones de las autoridades palestinas llegaron horas después de que el Alto Consejo de Planeamiento de COGAT, la oficina israelí de coordinación para actividades en los territorios palestinos, aprobara la construcción de más de tres mil viviendas que estarán distribuidas en casi 30 asentamientos.

"Cruzar las líneas rojas"

El domingo pasado, Israel sacó a licitación pública un proyecto para edificar 1.355 unidades de vivienda en siete colonias judías de Cisjordania. Tras este anuncio, el ministerio de Exteriores de Palestina acusó a Israel de "cruzar las líneas rojas" en Cisjordania ocupada. 

"El Gobierno israelí continúa su guerra abierta contra la presencia palestina en Jerusalén y las áreas clasificadas como "C" (bajo control militar israelí en Cisjordania)", declaró la cancillería palestina. Mientras que el ministro israelí de Vivienda, Zeev Elkin, defendió la medida "después de un largo período de estancamiento en la construcción". Sin embargo, no todos en la coalición gobernante están a favor de la medida que avanza sobre la colonización de territorio palestino. El partido de izquierda Meretz se opuso abiertamente a la decisión.

El enviado especial de la ONU para el proceso de paz en Oriente Medio, Tor Wennesland, también se sumó a la condena de la decisión tomada por el gobierno de Naftali Bennett.

"Reitero que todos los asentamientos son ilegales según el derecho internacional, siguen siendo un obstáculo sustancial para la paz y deben cesar de inmediato", reprendió el alto representante de la ONU.

 
Es la primera medida de ese tipo desde la asunción de Biden en Estados Unidos, en enero pasado. Bajo la administración de Donald Trump (2017-2021), EE.UU. apoyó abiertamente los asentamientos en Cisjordania ocupada.