“¡Espabila, niño!”. El rezongo de Luisito Rey parece haber calado hondo hacia adentro de la mismísima Luis Miguel: la serie, cuya tercera temporada acaba de estrenarse por Netflix. Además de continuar la saga del ídolo mexicano, lo más destacable de la telenovela es la reaparición del villano de antología (encarnado por Oscar Jaenada) por medio de unos flashbacks. El nuevo arco, por otro lado, presenta unos días bien picosos para el cantante (interpretado por Diego Boneta) entre los mediados de los ’90 y el nuevo siglo.
El cierre de la biopic será más compacto, apenas seis episodios que ya están disponibles. El dueto con Frank Sinatra. El romance con Mariah Carey (Jade Ewen). La faceta como mariachi. Más nubarrones financieros y legales que amenazan con destruir su presente. En definitiva, la transición y el arco de Micky se miran al espejo con un fantasma hamletiano curtido en Andalucía. Enhorabuena, “¡Coño, Micky!” está de vuelta.