Los gritos destemplados contra la “casta política” formaron parte del ADN de la fuerza ultraliberal que encabeza en CABA el economista Javier Milei. El tema no es menor porque le sirvió para posicionarse entre los ciudadanos indignados con todas las alternativas de representación ofrecidas en el mercado electoral, en línea con el ya añejo “Que se vayan todos”, que tuvo su momento estelar en la crisis de 2001.
Pero en los últimos días, el autodenominado candidato anarco liberal empezó a hacer distinciones en esa “casta política”. En realidad, clarificó su verdadero posicionamiento en el tablero nacional. Primero se conoció que se había reunido con el expresidente Mauricio Macri tres semanas antes de las PASO y después justificó públicamente esa acción, reivindicando la figura de Macri entre sus posibles aliados para el futuro.
Colectivistas vs. halcones
En su última aparición televisiva en el canal de cable TN, dejó clara la división que imagina en el espectro político y el lugar en que él mismo se coloca. “Por un lado están los colectivistas –empezando por la UCR, la Coalición Cívica, la mayoría del peronismo y la izquierda—y del otro los libertarios, los conservadores, el peronismo republicano y los halcones de Juntos por el Cambio”, esquematiza, antes de calificar a Domingo Cavallo como el mejor ministro de Economía de la historia argentina y a Carlos Menem como el mejor presidente.
En realidad, la matriz propuesta ahora por el candidato ultraliberal no difiere tanto de la que podría realizar la mayoría de los peronistas, y en particular el candidato del Frente de Todos en la Ciudad Autónoma, Leandro Santoro, quien se inscribe en el alfonsinismo y sostiene que fue justamente esa identidad la que lo llevó a confluir con el peronismo.
Para Milei, el prócer radical Raúl Alfonsín solo hizo “aberraciones” económicas durante su paso por la presidencia.
Mi amigo Mauricio (Macri)
Después de exponer su marco conceptual, Milei se dedicó a explicar por qué se reunió con Macri y a rescatar la figura del ex presidente, quizás para decepción de los que habían confiado en su repudio a todo el sistema político tal como lo conocemos.
“En primer lugar, cuando Macri llegó a la presidencia tenía un discurso muy razonable, muy entendible. El punto es que si uno llega al poder y tiene a un lado a la UCR, con su socialismo impregnado hasta la médula, a la Coalición Cívica y a las palomas de Cambiemos, puede ser que quede encerrado. No lo dejaron tomar decisiones y por eso el gobierno fue lo malo que fue”, justificó el economista que también puso énfasis en aclarar que en ese momento él todavía no tenía la gravitación que le dieron los resultados de las PASO.
Mientras tanto, en otro lugar de CABA, Horacio Rodríguez Larreta...
En este punto, quizás convenga recordar que en el mismo momento en que se reunía con Macri, tres semanas antes de las elecciones primarias, Milei le decía al Jefe de Gobierno de la Ciudad: “¿Sabés qué, Larreta? Como el zurdo de mierda que sos, a un liberal no le podés ni lustrar los zapatos, sorete. Te puedo aplastar aún en silla de ruedas, a ver si lo entendés.” Por si no había quedado clara su mirada sobre el jefe de las “palomas”, también lo definía como “un gusano asqueroso arrastrado, capaz de haer cualquier cosa con tal de ganar una elección”.
Un halcón para las autocríticas
El segundo argumento de Milei para levantar la figura de Macri es recordar que “el hombre hizo una autocrítica, después se sabrá si era cierta o no, y en el ordenamiento que yo estoy planteando no lo veo del lado de los colectivistas. No todos los liberales somos de mismo estilo. De hecho, vos tenés liberales clásicos, liberales minarquistas y anarco capitalistas. Si hizo una autocrítica y dice que ahora va a abrazar más fuerte las ideas de la libertad, me parece que él está del lados de los halcones, no de las palomas”, concluyó.