Desde el Ministerio de Seguridad provincial señalaron que en las últimas semanas se multiplicaron las llamadas a la central de emergencias 911 sobre falsas alarmas de bombas en colegios, establecimientos públicos y privados. Ayer se produjeron dos llamados que obligaron a evacuar las oficinas en Santa Fe de Cablevisión por tercera vez en un mes y la escuela secundaria Almirante Brown, por quinta vez en tres semanas. El jueves pasado ya había ocurrido lo mismo en la sede de la Empresa Provincial de la Energía (EPE), en bulevar Gálvez por lo que la Policía tuvo que activar el protocolo de evacuaciones, cerrar el tránsito y convocar a la Brigada de Explosivos en nueve ocasiones en menos de 30 días, todas con resultado negativo. También hubo una falsa amenaza al 911 en el Aeropuerto Internacional de Fisherton, luego que se recibiera una llamada al centro de informaciones que obligó a evacuar el edificio.

En lo que va de mayo, según reveló a este diario el director provincial de Tecnologías para la Seguridad, Jorge Carrera, la central de emergencias 911 recibió nueve falsas alarmas de bombas en Rosario, superando el promedio de meses anteriores.

"Tenemos un grave problema en ese sentido porque hay que movilizar muchos recursos: Bomberos, Defensa Civil, Brigada de Explosivos, todos los móviles que están en el sector, tránsito, la GUM, Litoral Gas, la EPE, todo por una broma", apuntó el funcionario, quien descartó el incremento de falsas llamadas por los cambios que se produjeron hace unos días en la dirección del 911, en el marco de los cambios dispuestos por el jefe de Policía, José Luis Amaya.

En Santa Fe, la amenaza a Cablevisión paralizó la actividad de la empresa durante toda la mañana, se recibió a las 7.30 y fue descartada cuatro horas después. Mientras que en el caso de la escuela Almirante Brown el llamado coincidió con la salida del turno mañana, al que asisten 600 alumnos y el ingreso del turno tarde, al que concurren otros 300 estudiantes. Ayer, chicos, docentes y directivos estuvieron más de dos hora en la calle, a la espera de que se cumpliera el protocolo y se confirmara que era otra falsa alarma, la quinta en tres semanas.

"El hecho produce una gran conmoción", dijo la directora la escuela Roxana Maülle a Rosario 12. Y confirmó que la amenaza no fue recibida en el establecimiento, sino en la central de emergencias. "Llaman directamente al 911, en las cinco amenazas ocurrió lo mismo. Y lo que me informó la Policía es que estas amenazas no son exclusivas de la escuela, sino que se están apuntan a distintas dependencias de la ciudad de Santa Fe, como la EPE, Cablevisión y otros lugares".

Maülle dijo que ya informó por la vía jerárquica al director de la Regional 4, Juan Cruz Giménez, lo que significa que la ministra de Educación, Claudia Balagué, también está al tanto de los hechos. 

Consultada sobre si tenía alguna hipótesis, Maülle respondió: "No tenemos ninguna sospecha de la escuela. Si la Policía dice que hay amenazas a otras instituciones, es el Ministerio de Seguridad el que debe investigar de qué se trata. Nosotros hemos pedido a la Policía de Investigaciones que traten de localizar de dónde provienen las llamadas al 911. En general, son llamadas desde teléfonos bloqueados, fuera de servicio", explicó la docente.

El centro de informaciones del aeropuerto internacional de Rosario recibió ayer a las 11.30 una amenaza de bomba. Minutos más tarde, hubo otra llamada a la central de emergencias 911. Por tal motivo, todo el personal fue desalojado a un parque contiguo al edificio. Dos horas después, y luego de un rastrillaje realizado por la policía, retomaron las actividades y no hubo necesidad de reprogramar vuelos. La vocera del aeropuerto, Cecilia Gabenara Boero, señaló que "las tareas de rastrillaje con perros no arrojaron resultados positivos" por lo que la policía habilitó el regreso de los empleados y los usuarios.

"Las llamadas se realizan en horarios centrales cuando hay muchísima actividad y donde es muy complejo realizar las evacuaciones de los edificios", señaló Carrera, quien pidió un uso responsable del sistema.