Estados Unidos acusó a Siria de instalar un crematorio en una prisión para destruir restos de miles de prisioneros ejecutados y cargó contra Rusia e Irán por permitirle al gobierno de Bashar Al Assad llevar a cabo esas matanzas. Para apoyar la denuncia, Stuart Jones, subsecretario interino del Departamento de Estado para Oriente Próximo, exhibió a la prensa fotos satelitales que habrían sido recientemente desclasificadas donde se muestra el complejo carcelario de Saydnaya, ubicado al norte de la capital siria. Después de que Washington saliera a divulgar las supuestas pruebas que apuntan al régimen sirio como responsable de los asesinatos de miles de prisioneros, la embajadora de Estados Unidos en Naciones Unidas (ONU), Nikki Haley, apuntó contra Moscú y Teherán por hacer omisión de esos crímenes cometidos al parecer por Damasco. El enviado especial de la ONU para Siria, Staffan de Mistura, indicó un día antes del inicio de la sexta ronda de conversaciones indirectas en Ginebra entre Damasco y los rebeldes, que tendrá lugar hoy, que las zonas seguras acordadas en Astaná no podrán sostenerse “si no hay un horizonte político concreto, en una dirección u otra”.
En las fotos que mostró Stuart Jones se pueden ver los techos de los diferentes edificios del complejo sirio con anotaciones como “prisión principal” y “probable crematorio”. El subsecretario interino del Departamento de Estado para Oriente Próximo señaló que, a partir de 2013, el régimen de Al Assad modificó un edificio en el complejo de Saydnaya para lo que las autoridades norteamericanas sospechan es un crematorio. “Aunque las muchas atrocidades del régimen están bien documentadas, creemos que la construcción de un crematorio es un esfuerzo por encubrir la extensión de las matanzas que ocurren en Saydnaya”, expresó el funcionario.
En una de las fotos uno de los edificios lleva la mención “nieve derretida sobre una parte del techo”, detalle que, según el funcionario, indicaría la existencia de “un crematorio instalado por el régimen”. Jones dijo que la información llegó a conocimiento de Washington a través de agencias humanitarias creíbles así como de la “comunidad estadounidense de inteligencia”. Dijo que hasta 50 personas son ahorcadas por día en esa prisión.
Aunque el funcionario no ofreció un número oficial de víctimas, mencionó un estudio de Amnistía Internacional donde se afirma que entre 5.000 y 11.000 sirios murieron en la prisión entre 2011 y 2015. En ese mismo período, alegó Jones, el gobierno de Assad habría detenido entre 65.000 y 117.000 personas. El informe de Amnistía Internacional donde constan esas cifras, sin embargo, no hace alusión a un crematorio en las instalaciones. Desde Beirut, el Observatorio Sirio de Derechos Humanos informó que no posee información de que haya un crematorio.
La acusación sobre la existencia de un eventual crematorio tiene lugar días después de la visita del canciller ruso, Sergei Lavrov, a Washington, donde mantuvo encuentros con el presidente Donald Trump y el Secretario de Estado, Rex Tillerson. La embajadora de Estados Unidos en la ONU disparó contra Moscú y Teherán. “El intento de encubrir asesinatos masivos en el crematorio de Al Assad es evocador de las peores ofensas contra la humanidad del siglo XX”, dijo la representante en un comunicado. Según Haley, aunque el presidente de Siria tiene la mayor responsabilidad por su propia brutalidad, sus aliados también soportan una pesada carga.
“Rusia e Irán permiten a Al Assad los secuestros, la tortura, las ejecuciones extrajudiciales, los ataques aéreos, los barriles explosivos y los ataques con armas químicas”, opinó la funcionaria. Las palabras de Haley van en línea con lo expresado ayer por Jones. El funcionario pidió a Moscú que aumente la presión para que las autoridades sirias “rindan cuentas por esas atrocidades que llevan al régimen de Damasco a un nuevo nivel de depravación”.
En respuesta a Al Assad, que el jueves afirmó en la televisión bielorrusa que los encuentros de Ginebra eran sólo para los medios y no producirían nada sustancial, el enviado especial de la ONU para Siria resaltó en rueda de prensa que había una delegación oficial siria trabajando en la localidad suiza. “No quiero entrar en ningún tipo de comentario con respecto a las declaraciones hechas por el presidente Al Assad. Lo que puedo decir es que su delegación ha llegado (a Ginebra) y tiene la autoridad para entablar conversaciones serias”, recalcó Staffan de Mistura.
“Ninguna reducción de la violencia se mantendrá si no hay un horizonte político concreto en una dirección o en otra”, consideró el mediador, consultado por el acuerdo que el 4 de mayo firmaron Rusia, Turquía e Irán en Astaná, Kazajistán, para reducir las hostilidades en cuatro zonas del país. Zonas de distensión identificadas, pero aún no delimitadas, a la espera de que los tres países garantes se pongan de acuerdo sobre cómo protegerlas para que sean realmente efectivas.