Marcelo Sebastián D’Alessio terminó la semana con una buena noticia. El tribunal que lo condenó por la extorsión al empresario Gabriel Traficante le concedió la excarcelación, pero no saldrá en libertad porque sigue en prisión preventiva en la causa de espionaje que tramita en Dolores. Sin embargo, la decisión del Tribunal Oral Federal (TOF) 2 le da envión para su objetivo de la próxima semana: que lo acepte como arrepentido el fiscal Juan Pablo Curi y que lo avale el juez Martín Bava.
El jueves, el defensor oficial de D’Alessio, Santiago Finn, pidió al TOF 2 que excarcelaran al falso abogado que en agosto pasado fue condenado a cuatro años de prisión. El argumento de Finn era que cumplió el tiempo detenido como para la libertad condicional, es decir, los dos tercios de la condena. Por la extorsión a Traficante, D’Alessio está detenido desde el 6 de marzo de 2019. Tres semanas antes, había ordenado su detención el juez federal Alejo Ramos Padilla, en la causa que se inició en Dolores con la denuncia del empresario Pedro Etchebest.
El juez Jorge Gorini entendió que le correspondía la excarcelación a D’Alessio no sólo por el tiempo que ya lleva detenido, sino también porque dentro de la cárcel su conducta fue ejemplar y no mereció ninguna sanción disciplinaria por parte del Servicio Penitenciario Federal (SPF). Su colega Javier Ríos coincidió, mientras que el juez Rodrigo Giménez Uriburu se opuso --en sintonía con la postura del fiscal Diego Luciani--.
Antes de dejar el Juzgado de Dolores, Ramos Padilla prorrogó la prisión preventiva de D’Alessio, decisión que fundó en el accionar del falso abogado y en la red de contactos que tejió para llevar adelante más de medio centenar de operaciones. El juez definió a D’Alessio como un espía con terminales en la Agencia Federal de Inteligencia (AFI), en el Ministerio de Seguridad del macrismo, en el Ministerio Público Fiscal (MPF) y en el Poder Judicial. Al momento de prorrogar su prisión preventiva, D’Alessio ya contaba con cinco procesamientos en su haber.
D’Alessio realizó otra movida en las últimas horas. Su abogado Claudio Fogar presentó un escrito ante la fiscalía de Curi, anunciando que D’Alessio quería buscar un acuerdo como arrepentido. La intención de D’Alessio era lograr una autorización para dejar la cárcel de Ezeiza e ir en persona Dolores para entrevistarse con Curi. El fiscal accedió a la audiencia: será el jueves, pero a distancia.
Hacia finales de 2019, Curi aceptó a D’Alessio como arrepentido. Sin embargo, Ramos Padilla no homologó el acuerdo. Dijo que no se trataba de una “permuta”. La Cámara Federal de Mar del Plata lo respaldó. La expectativa es que D’Alessio aporte algo que no haya sido revelado por la abundante prueba reunida en el expediente. Si el fiscal volviera a aceptarlo como arrepentido, ese acuerdo debería ser validado por el juez Bava, que tiene entre sus manos en este momento la situación procesal de Mauricio Macri en otra causa de espionaje --la del ARA San Juan--.
En su última aparición pública, al momento de dar sus últimas palabras ante el TOF 2, D’Alessio apuntó hacia el fiscal Carlos Stornelli y hacia la exministra Patricia Bullrich por haberlo desconocido después de su caída en desgracia.