El PJ bonaerense, los intendentes peronistas y, por primera vez, representantes de los restantes partidos que conforman el Frente para la Victoria se reunirán en el ya típico encuentro de los martes para discutir la estrategia electoral para la provincia de Buenos Aires. Este sector mayoritario, que reconoce el liderazgo de la ex presidenta Cristina Kirchner, impulsa el armado de una lista de unidad aunque, enfrente, los dirigentes nucleados alrededor del ex ministro Florencio Randazzo insisten en que lo mejor es resolver sus diferencias en las primarias abiertas de agosto. Randazzo ayer sumó el apoyo del triunviro de la CGT, Héctor Daer, algo que generó rechazos en el Frente Renovador al que pertenecía.
Las reuniones comenzaron como encuentros de intendentes que se ampliaron, primero, con la conducción del PJ que encabeza Fernando Espinoza y, luego, con los principales dirigentes de La Cámpora, que incluso hicieron de anfitriones en el quincho de Caballito del diputado Juan Cabandié. Por allí pasó Cristina Kirchner para conversar sobre el panorama económico y social antes de su gira por Europa. En el último encuentro, las reuniones se trasladaron a una fundación que el intendente de Florencio Varela, Julio Pereyra, tiene sobre calle Bolívar, en el centro porteño. Curiosamente, la nueva sede para planificar la campaña del PJ bonaerense queda a dos cuadras del búnker de Randazzo, en Moreno al 500.
En cada reunión van algunos intendentes más. A la última concurrieron 36, tanto del Conurbano como del interior provincial. No fue Máximo Kirchner pero sólo porque había sesión en Diputados. La conclusión que se llegó allí fue que debían ampliar la convocatoria a sindicatos, organizaciones sociales y demás expresiones del “campo nacional y popular”, opuestas a las políticas del macrismo.
En principio, está confirmado que hoy participarán el resto de los partidos que tradicionalmente vinieron formando parte del Frente para la Victoria. Los invitados no descartaban algún momento de tensión durante el debate, por las diferencias entre algunas posiciones. Hay coincidencia en cuanto al reconocimiento a la jefatura de CFK, pero no se ponen de acuerdo en el nivel de apertura aconsejable en las listas. Desde La Cámpora y aliados creen que no es recomendable poner candidatos que no den la certeza de llevar adelante una línea de oposición frontal al macrismo. Por eso entienden que es posible que algunos intendentes, principalmente del interior bonaerense donde el kirchnerismo no es tan fuerte, puedan hoy pegar el faltazo.
Las encuestas publicadas el fin de semana –y las que manejan los intendentes en el Conurbano– muestran que el macrismo tiene un piso más alto del que se esperaba en la Provincia, de alrededor del 30 por ciento. El fenómeno que notan es que los puntos que deja en el camino el Frente Renovador de Sergio Massa van en mayor medida a Cambiemos que al peronismo. “Por eso tenemos que hacer el máximo esfuerzo en trabajar en la unidad”, explicaba un intendente que hoy participará del encuentro.
Sin embargo, desde el sector de Randazzo insisten en las bondades de la interna en su afán de armar un polo peronista diferenciado del kirchnerismo. “Va a ser un paso importante que el peronismo elija los candidatos en elecciones directas” en las PASO “y no mirando encuestas”, sostuvo el intendente de San Martín, Gabriel Katopodis, un integrante del Grupo Esmeralda que estuvo entre los primeros apoyos al ex ministro. Katopodis habló de los “muchos sectores que se fueron” del justicialismo “están queriendo participar y ser parte de este proceso” alineado detrás de Randazzo.
El ex ministro ya designó al ex jefe de Gabinete Alberto Fernández como su jefe de campaña y ahora parece casi natural que muchos dirigentes justicialistas que revistaban en el massismo se vayan con él. Ya le ofreció la candidatura a diputado a Felipe Solá y ayer fue Héctor Daer quien reveló su salto. “Randazzo es el mejor candidato que tiene el peronismo”, afirmó. También dijo que estaba trabajando en la unidad del PJ mientras que Massa pensaba que no era momento de participar de la interna del peronismo, algo que podía verse en su alianza con el GEN de Margarita Stolbizer.
En el Frente Renovador hicieron fila para criticarlos. La diputada Graciela Camaño y el senador bonaerense Jorge D’Ónofrio aseguraron que hacía mucho que Alberto Fernández y Daer no integraban el Frente Renovador. D’Onofrio aseguró que Daer había intentado negociar su reelección como diputado con Massa y que lo que lo había dejado afuera del FR fueron “las actitudes que tuvo” como, por ejemplo, cuando se trató el Impuesto a las ganancias en el Congreso.