A menos de una semana de las elecciones legislativas que se celebrarán el próximo domingo y hablando en la misa de apertura de la asamblea plenaria de la jerarquía católica, Oscar Ojea, Presidente de la Conferencia Episcopal Argentina (CEA), sostuvo que “en este tiempo de tanta fragmentación” los obispos “nos sentimos hondamente comprometidos para llevar adelante” un “camino de reencuentro entre todos los argentinos”.
El episcopado inició este lunes en la localidad bonaerense de Pilar su asamblea plenaria, que se extenderá hasta el viernes, y durante la cual se elegirán también nuevas autoridades para los próximos tres años. Ojea, obispo de San Isidro, es firme candidato a ser reelegido por sus pares para continuar al frente de la Conferencia Episcopal.
En la homilía de la misma inaugural el obispo Ojea retomó el magisterio reciente del papa Francisco, quien ha venido insistiendo en el tema de la escucha.
“Escuchar no es una actitud pasiva sino activa en la receptividad, requiere silencio interior” afirmó el obispo de San Isidro, porque “cuando tengo mucho ruido interno no puedo escuchar”. Y agregó que “muchas veces pensamos que ya sabemos lo que el otro va a decir y jugamos interiormente a confirmar nuestro presentimiento”.
En un mensaje dirigido en primer lugar a sus pares, el presidente sostuvo que “en este tiempo de tanta fragmentación en el que todos buscamos diferenciarnos y afirmarnos en nuestros derechos, que la Iglesia salga a escuchar, representa un cambio de paradigma, que significa no quedarse atrincherado en los propios discursos, buscando seguridades solo en aquellos con quienes tenemos afinidad de pensamiento y sensibilidad”.
La escucha, afirmó el obispo, “es el primer paso del proceso del perdón que nos deja a la puerta de (…) un camino de reencuentro, recomenzando por la verdad”. No obstante, haciendo suyas las palabras de Francisco en Fratelli tutti, aseguró que “reencuentro no significa volver a un momento anterior a los conflictos” porque “con el tiempo todos hemos cambiado, el dolor y los enfrentamientos nos han transformado, además ya no hay lugar para diplomacias vacías, para disimulos, para dobles discursos, para ocultamientos y para buenos modales que esconden la realidad”.
Repitiendo palabras del Papa el Presidente de la Conferencia Episcopal alegó que “los que han estado duramente enfrentados conversan desde la verdad clara y desnuda, les hace falta aprender a cultivar una memoria penitencial capaz de asumir el pasado para liberar el futuro de las propias insatisfacciones, confusiones o proyecciones”.
Ojea retomó una cita de Francisco en la que el Papa recuerda que “solo desde la verdad histórica de los hechos podrán hacer el esfuerzo perseverante y largo de comprenderse mutuamente y de intentar una nueva síntesis para el bien de todos” y que “el proceso de paz es un esfuerzo paciente que busca la verdad y la justicia, que honra la memoria de las víctimas y que se abre paso a paso a una esperanza común, más fuerte que la venganza”.
Dirigiéndose a sus colegas obispos “en este primer encuentro después de tanto tiempo” Ojea subrayó que “queremos renovar nuestro compromiso de vivir en la verdad, siendo testigos fieles, que tenemos el honor de servir al Señor y a su Pueblo”, hizo un llamado a “vivir una Iglesia en salida, una Iglesia que sale a escuchar” y pidió coherencia a sus pares porque “vivir disociado, vivir una doble vida, produce escándalo en el pueblo de Dios y si esto se establece como un estado habitual, ya no es un pecado de debilidad sujeto al arrepentimiento y al perdón, sino que es corrupción”.
Son 98 los obispos habilitados para votar en las elecciones de la Conferencia Episcopal quienes, mediante sufragio secreto, elegirán a los integrantes de la Comisión Ejecutiva (presidente, dos vicepresidentes y secretario general) y a las autoridades de las comisiones episcopales a cargo de temas específicos. Se estima que los resultados de las votaciones para designar a los miembros del ejecutivo eclesiástico pueden conocerse en la noche del martes.