El Juzgado de Garantías 8, hizo lugar al requerimiento del fiscal penal de Cerrillos, Gabriel Portal, quien solicitó la libertad de una mujer de 21 años de Coronel Moldes, aunque aplicando medidas sustitutivas. Dichas medidas son en el marco de la causa en la que fue detenida e imputada, acusada del delito de desobediencia judicial.
La joven fue acusada luego de haberse acercado a la casa de su expareja para dejarle a la hija de ambos de tres años bajo su cuidado, ya que ella debía presentarse a trabajar y no contaba con la ayuda de nadie más en ese momento. Tanto la mujer, como su pareja tienen órdenes de restricción.
Ella había realizado una denuncia por violencia de género contra su expareja, padre de su hija en agosto, y en septiembre le salieron las medidas cautelares con la prohibición de acercamiento e instaban al agresor a abstenerse de ejercer actos de violencia.
Actualmente la joven madre es asistida legalmente por María Nella Cervi, abogada del Instituto Jurídico de Género de Salta, quien contó que “cuando ella se quedó embarazada, él se fue a vivir al sur, después sabía de la existencia de la nena, no se interesó en conocerla. Cuando volvió retomaron la relación de pareja pero él no la reconoció a la hija. Después de que ella hace la denuncia (cuando le pegó), él se arrepiente, dice que quería reconocer a la nena y pagar los alimentos. La intermediaria era la mamá de ella", explicó.
Esta es la segunda vez que acusan a la imputada de desobediencia judicial, la primera vez que sucedió fue exactamente por lo mismo.
La petición de la fiscalía para otorgarle la libertad se basó en el hecho de que la joven no registra antecedente condenatorio alguno, la naturaleza de los hechos y el entorno familiar. La detención a la mujer se dio el jueves por la noche, por lo que estuvo más de tres días en esa condición.
Las medidas que le aplicaron desde ahora consisten en la obligación de comparecer ante la sede fiscal de El Carril cada 15 días; la prohibición de salir de la provincia sin previa autorización del juzgado interviniente y la prohibición de acercamiento al padre de la menor, entre otras.
La determinación de detener a la mujer ordenada por el fiscal Portal, tuvo la inmediata reacción de distintos sectores, especialmente de los movimientos feministas, que durante las últimas horas habían organizado una campaña pidiendo por su liberación y apuntando contra el fiscal, "por carecer de perspectiva de género en su accionar".