La extensión de una tercera dosis de vacuna para todos los franceses de entre 50 y 64 años y la exigencia de tenerla para todos los mayores de 65 para renovar el pase sanitario fueron los principales anuncios formulados este martes por el presidente de Francia, Emmanuel Macron. En un mensaje televisado, Macron también habló, largamente y en tono electoralista, sobre las reformas económicas realizadas y las pendientes a cinco meses de las elecciones presidenciales y confirmó que retrasará la polémica reforma de las pensiones.
A partir de diciembre se iniciará un campaña para estimular a los que tengan entre 50 y 64 años a que se pongan la tercera dosis, ya que "más del 80 por ciento de los ingresados en cuidados intensivos tienen más de 50 años". Macron endureció la situación de los mayores de 65 años, inmunodeprimidos o con enfermedades serias que necesitarán una tercera dosis a partir del 15 de diciembre para renovar el pase sanitario, un código QR generado con una pauta completa de vacunación necesario para entrar en lugares públicos.
El presidente francés alertó que Europa ya se enfrenta a "una quinta oleada" de covid-19, que ha empezado a golpear fuerte a países como Alemania y el Reino Unido. Además de nuevas exigencias sanitarias, Macron aprovechó su discurso para anunciar que Francia volverá a construir reactores nucleares, y confirmó que renunciará a adoptar durante este mandato la reforma de las pensiones debido a que "no se reúnen las condiciones para reimpulsar esta medida", que desató una ola de protestas a fines de 2019 y quedó congelada con la pandemia.