Luego de defenestrar el acercamiento de la Argentina a China que inició el gobierno anterior, el presidente Mauricio Macri aseguró ayer que existen pocos países en el mundo más complementarios. En la previa a la reunión que mantendrá con su par chino Xi Jinping, el mandatario argentino se deshizo en elogios respecto de la potencialidad que tienen ambos países trabajando juntos, con lo cual pretendió allanarse el camino hacia las inversiones del gigante asiático. “Será el principio de una época maravillosa entre ambos países. Debe haber pocos países en el mundo más complementarios que la Argentina y China”, enfatizó Macri. No sólo cambió su discurso sino que despreció con él lo hecho anteriormente. Destacó que China es actualmente “el segundo socio comercial y un importante inversor” y señaló que el futuro de la relación bilateral “es mucho más relevante de lo que sucedió en el pasado”.
Tanto el mandatario como varios de sus funcionarios habían criticado duramente la estrategia internacional del kirchnerismo hacia una mayor integración con el gigante asiático, la cual, consideraban, se contraponía con su idea de “reinsertarse al mundo”. La contrapropuesta del macrismo era reencauzar las relaciones carnales con los Estados Unidos, aunque un Donald Trump más proteccionista hizo al gobierno argentino abandonar esa ilusión. Entonces la diplomacia argentina debió reencauzar proyectos y relaciones que habían quedado pactadas previamente por el gobierno anterior, como el financiamiento de dos nuevas centrales nucleares que ya habían firmado ambos gobiernos.
“China es un socio absolutamente estratégico”, insistió Macri en el Foro de Negocios e Inversiones que reunió a empresarios de ambas naciones en un hotel de esta capital. “Nada supera lo que se logra en el ida y vuelta entre las personas. Tenemos que apostar cada vez más a entendernos, conocerlos y aumentar la confianza entre nosotros, que es el elemento central que dinamiza y potencia el futuro de todos”, puntualizó el funcionario, buscando explicar el cambio de postura. Puso como ejemplo del interés por esta relación el hecho de que haya viajado a Beijing “una delegación tan nutrida e importante de empresarios argentinos que vienen a buscar relacionarse, a construir proyectos en común con empresarios de este impresionante país”.
“Tenemos mucho para aportar en seguridad alimentaria, en temas de tecnología y en el deporte”, les ofreció. Remarcó que varias empresa chinas apostaron por la Argentina en los últimos años y se manifestó esperanzado en que “muchas nuevas quieran invertir en este proceso que comenzó en la Argentina”.
Macri se reunirá hoy con Xi Jinping, en donde se rubricarán algunos acuerdos de complementación e inversión, en su mayoría discutidos y pactados con el gobierno anterior. Durante la jornada de ayer, mantuvo una serie de encuentros con los responsables de las empresas más importantes de China, en su mayoría vinculadas con la construcción de obras de infraestructura. En ese marco se firmará un avance del acuerdo comercial con China para la construcción de dos centrales nucleares que ya había sido rubricado por Cristina Kirchner, cuyo gobierno promovió esa iniciativa. La canciller Susana Malcorra sostuvo que la confirmación de ese compromiso es la antesala del cierre del convenio, que tendrá lugar “en los próximos tres meses”.