Qatar representará los intereses de Estados Unidos en Afganistán. El acuerdo fue anunciado por el canciller estadounidense, Antony Blinken, durante el Diálogo Estratégico anual que mantiene con Doha. El convenio además formalizaría el rol de Qatar que tras el cierre de la embajada de Washington en Kabul se encargó de las operaciones de la sede diplomática estadounidense en Afganistán.
Qatar como "potencia protectora"
El jefe del Departamento de Estado, Antony Blinken, recibió a su par qatarí, el ministro de Relaciones Exteriores, Sheikh Mohamed bin Abdulrahman al Thani, para el cuarto Diálogo Estratégico entre ambos países. Blinken anunció la firma de un acuerdo que "establece a Qatar como la potencia protectora de Estados Unidos en Afganistán". Según el Pentágono, Qatar servirá también como "punto de tránsito" para los afganos con derecho a visa especial de EE.UU. durante el proceso de tramitación de esas solicitudes.
"Permítanme expresar lo agradecidos que estamos por su liderazgo y apoyo en Afganistán, pero también destacar que nuestra relación es mucho más amplia que eso", dijo Blinken sobre el acuerdo que permitirá que la delegación diplomática de Qatar en Kabul tenga una sección de intereses de Estados Unidos que estará encargada de servicios consulares y de vigilar las condiciones y la seguridad las instalaciones abandonadas por el Pentágono.
“Los acontecimientos ocurridos en Afganistán en los últimos meses han reforzado esa colaboración, incluso en las cuestiones más delicadas y urgentes”, afirmó el canciller estadounidense. “De las más de 124 mil personas evacuadas en agosto, aproximadamente la mitad transitaron por Qatar. Y esa labor continúa”, añadió.
Sede diplomática
La segunda parte del acuerdo formaliza el trabajo que realiza Qatar para facilitar la llegada de afganos con visado especial de Estados Unidos y operar como país de tránsito para que ciudadanos de Afganistán que reúnan los requisitos completen su proceso de aplicación, informó Blinken.
Por su parte, Al Thani se refirió al trabajo para evacuar a más de 60 mil personas, entre ellos estadounidenses, afganos empleados por la EE.UU y la OTAN junto a sus familias, y periodistas de todo el mundo. “Qatar tuvo el honor de estar en una posición de confianza para intervenir y rescatar a tantas personas, y seguiremos siendo un instrumento de paz y estabilidad en la región”, afirmó el ministro qatarí.
"Creemos que abandonar Afganistán será un gran error, e ignorarlo, porque el aislamiento nunca ha sido una respuesta, ni una solución, para ningún asunto", dijo Al Thani. "El compromiso es la única manera de avanzar".
Por otra parte, Blinken confirmó que hasta al 10 de noviembre, a todos los estadounidenses (más de 380 ciudadanos estadounidenses y más de 280 residentes permanentes) que pidieron asistencia Washington para salir de Afganistán se les ofreció una oportunidad para hacerlo. “Es un panorama que cambia regularmente”, afirmó. “Algunas personas que se han identificado como estadounidenses dicen, sin embargo, que no quieren marcharse porque sus familias, están en Afganistán”, añadió el canciller.
Conversaciones entre EE.UU. y Afganistán
Aunque Estados Unidos no considera que el gobierno talibán sea legítimo, Washington mantuvo conversaciones con Kabul al menos dos veces en los últimos meses. La más reciente fue este jueves en Pakistán discutieron sobre la crisis humanitaria que podría azotar a Agfanistán con la llegada del invierno al país centroasiático. En octubre, el enviado del Departamento de Estado para política afgana, Thomas West, se reunió con la diplomacia talibán en Doha. Según confirmó esta semana, luego de que durante agosto y septiembre los esfuerzos estuvieron enfocados en la evacuación ahora están determinando como van a proteger sus “intereses nacionales vitales”.
West además afirmó que el gobierno talibán manifestó “de forma clara y abierta su deseo de normalizar relaciones con las comunidad internacional; de ver la reanudación de la ayuda; de ver el retorno de la comunidad diplomática internacional a Kabul; de ver un alivio de las sanciones”. Por otra parte, West dijo a la prensa que Estados Unidos "no está pensando seriamente" en reabrir la embajada de Kabul en este momento.
"Creo que lo que queremos ver es el establecimiento de un registro de conducta responsable por parte de los talibanes, de conducta predecible, y entonces evaluaremos qué necesidades tenemos en el frente diplomático", dijo durante una llamada informativa sobre la reunión con los talibanes.
Qatar fue la sede de las conversaciones entre Estados Unidos y los talibanes que llevaron al acuerdo firmado en febrero de 2020 para el retiro de las tropas norteamericanas. Desde la vuelta al poder de los talibanes, la operaciones de la embajada de Estados Unidos en Kabul fueron redirigidas a Qatar.
Estados Unidos cerró su embajada en Kabul, que era una de sus más grandes sedes diplomáticas en el mundo, en agosto cuando se hizo evidente que el gobierno respaldado por Occidente se estaba viniendo a abajo. Los diplomáticos destruyeron material sensible y bajaron la bandera. Qatar fletó 15 vuelos a Afganistán tras la victoria talibán y, junto a Turquía, propuso renovar el aeropuerto de Kabul.