El gobierno de Luis Lacalle Pou trabaja desde hace unos tres meses en habilitar la venta de marihuana legal a los extranjeros que llegan a hacer turismo al país, en principio en las farmacias.
Daniel Radío, secretario general de la Secretaría Nacional de Drogas (SND) y presidente del Instituto de Regulación y Control del Cannabis (Ircca), admitió en diálogo con el diario El País que le gustaría dar este paso “lo antes posible para empezar a probar qué pasa”.
Según reveló el artículo, en el Gobierno entienden que la reglamentación de la ley 19.172 de regulación y control del cannabis, promulgada el 20 de diciembre de 2013 por el entonces presidente José Mujica, presenta una “inequidad de base” al permitir el acceso al cannabis solo a ciudadanos uruguayos y extranjeros residentes.
“Creo que alguna vez nos va a parecer una obviedad en el devenir histórico que las personas cuando vayan a otro país puedan acceder a tomar una copa de vino o fumar cannabis si lo desean. Hoy todavía no porque tenemos resabios y coletazos del prohibicionismo”, sostuvo Radío, quien además habló del “siglo del prohibicionismo” y el fracaso de la guerra contra las drogas.
Por su parte, Remo Monzeglio, subsecretario de Turismo y también integrante de la Junta Nacional de Drogas, detalló que se viene trabajando en la idea de que se “debería pensar en una universalización del consumo” de cannabis, bajo la premisa de que “cualquier persona que esté dentro del territorio nacional, sea extranjera o no, debería tener las mismas posibilidades de acceder a consumir, en las mismas condiciones que un uruguayo”.
En esta tarea están trabajado Radío, Monzeglio, Nicolás Martinelli (asesor del presidente Lacalle Pou), el director ejecutivo del Ircca Diego Serrano, y personal del área jurídica del Ircca y Prosecretaría de Presidencia. Además, se deberá contar con consensos políticos a nivel del Ejecutivo, aunque estiman que eso sucederá.
En cuanto a la forma de encarar este proceso, Radío opinó en que la apertura debe ser “gradual”, por lo que estima que en una primera etapa los turistas podrán solamente acceder al cannabis en farmacias. Esto implicaría una modificación vía decreto que incluya a los extranjeros entre los adquirientes.
La legislación actual
La regulación uruguaya estableció tres maneras de acceder al cannabis psicoactivo de forma legal: el autocultivo, los clubes de membresía o clubes cannábicos, y la compra de la droga a través de una cantidad limitada de farmacias, aunque no se permite formar parte de más de una opción a la vez.
El decreto reglamentario 120/014 habilita a los autocultivadores a tener hasta seis plantas de cannabis y pone un límite de producción de 480 gramos por año. En total hay 12.902 cultivadores, de acuerdo a un relevamiento del Ircca actualizado al 10 de noviembre.
Los clubes de membresía pueden plantar hasta 99 plantas de cannabis, y contar con un mínimo de 15 socios y un máximo de 45, quienes no podrán acceder a más de 480 gramos por año cada uno. Se registran 213 clubes con 6.452 miembros al 10 de noviembre.
La tercera opción, que se fijó en mayo de 2014 pero se puso en marcha recién en julio de 2017, establece que se podrá acceder a un máximo de 10 gramos semanales o 40 gramos mensuales por persona en farmacias.
La situación en el mundo
A fines de 2013 Uruguay se convirtió en el primer país del mundo en regular la producción y comercialización de cannabis recreativo, todo bajo control estatal. Lo siguió Canadá en octubre de 2018.
A su turno, México despenalizó la marihuana en junio de 2021, lo mismo que hizo Portugal, entre otros países. En Estados Unidos, ya son 16 los estados -entre ellos Nueva York y Washington- que legalizaron el consumo de cannabis recreativo, en múltiples formatos.