El Concejo Municipal de Rosario pone hoy en disputa 13 de sus 28 bancas para reemplazar los mandatos que se vencen este 10 de diciembre después de cuatro años. Juntos por el Cambio es la fuerza que más escaños arriesga: Seis. Le siguen el peronismo con tres bancas que luchará por cubrir, el Frente Progresista con otras tres y la última corresponde a Ciudad Futura. Si bien la característica principal del parlamento local es la fragmentación política, el intendente Pablo Javkin supo pulir con esmero una línea de acuerdos que ya exploraba Mónica Fein en su gestión y hoy funciona en la práctica una amplia mesa de acuerdos con pocas excepciones. Y el rendimiento de estos diálogos pudo verse recientemente en dos votaciones clave: La de la ordenanza del alcohol 0 para la ciudad y el flamante Código de Convivencia que reemplazó al arcaico Código de Faltas del año 1981. Con nuevos actores luego de la elección de hoy, esa dinámica interna del Concejo no parece estar amenazada. Más teniendo en cuenta que el propio intendente puede ser acompañado por los resultados de la contienda.

De las 56 listas que se presentaron y compitieron en las PASO del 12 de septiembre, sólo los candidatos de cinco de esas nóminas alcanzaron el piso de votos requeridos para llegar a la segunda ronda de hoy. Es muy significativo, más que nada desde el punto de vista gráfico, cómo se despejó esa boleta única casi ininteligible que estuvo en los cuartos oscuros de las pasadas elecciones. De 56 caritas pequeñas entre las que había que buscar, esta vez serán sólo 5 y muy conocidas todas ellas.

Esa fue otra característica de estas elecciones, sólo uno de los cinco cabezas de listas a concejales no tuvo un paso como periodista por la televisión local: Juan Monteverde de Ciudad Futura, que tampoco les va en zaga en cuanto a grado de conocimiento entre los vecinos de Rosario.

Si bien no es la primera vez que se recurre a candidatos conocidos -hay un cocinero de la tele sentado en una banca, dos ex futbolistas de Newell´s y Central, una periodista con más de 20 años en la televisión de Rosario-, lo llamativo fue la cantidad de figuras que en esta tanda aceptaron el convite. Aunque no trascendió públicamente, se supo de por lo menos otras tres figuras televisivas que en esta oportunidad no se dejaron tentar.

El abuso del recurso de la cara conocida, independientemente del desempeño que cada uno después tenga al ocupar el cargo, habla sin dudas de las carencias que hoy tiene la política para hablarle a la sociedad. Conocimiento de los temas, formación y militancia parecen ser parte de un diccionario del pasado que tuvo con el correr de los años un enorme desgaste en el verdadero significado de esas palabras.

El problema además es que la ciudad, más allá de sus conflictos cotidianos de alumbrado, barrido, limpieza y transporte; enfrenta desafíos que si bien no son competencia directa de los concejales dan un contexto fuerte a las calles a la hora de gestionar. La violencia que no cede, el narcotráfico y los crecientes delitos predatorios han obligado a los candidatos locales a ensayar planes de seguridad a los que se pueda nutrir desde el Palacio Vasallo y en coordinación con la provincia y la Nación.

 

Ciro Seisas encabeza la lista de candidatos a concejales del Frente Progresista, Lisandro Cavatorta la del Frente de Todos, Ana Laura Martínez la de Cambiemos, Miguel Tessandori la del Partido Mejor y el ya mencionado Monteverde es el primer candidato de Ciudad Futura. En principio, todas las listas se llevarán bancas, teniendo en cuenta la performance que los trajo hasta aquí desde el 12 de septiembre. De acuerdo a la cantidad de votos y con la aplicación del sistema proporcional D’hont se determinará cuántas de las 13 serán para cada sector. El dato clave es la cantidad de gente que no votó en las PASO, los votos blancos y anulados que pueden repetirse o no y los sufragios que obtuvieron las opciones que no alcanzaron el piso para estar en esta segunda vuelta. Y esa sí que es una cifra abultada.