"Hoy es un día oportuno para que demos inicio a esta segunda etapa de Gobierno y empecemos con toda nuestra fuerza a levantar lo que haya que levantar en Argentina", expresó el presidente Alberto Fernández sobre el escenario montado frente a Casa Rosada en el que habló ante cientos de miles de personas, militantes y funcionarios que se acercaron para conmemorar el día de la militancia.
El mandatario aprovechó para enviar mensajes políticos, tanto a la oposición como al interior de la coalición y a sus votantes. Habló de los principales objetivos para los próximos dos años como resolver el problema de la deuda y fortalecer el crecimiento económico; cuestionó a los personajes más radicalizados de la oposición como el expresidente Mauricio Macri y el libertario Javier Milei, que se niegan a dialogar, y por último deslizó que dentro del FdT debe haber una mayor institucionalización del debate para que "en 2023 tengamos un triunfo rotundo y aseguremos la victoria que merecen los argentinos".
Salvo la vicepresidenta, Cristina Fernández de Kirchner, que se encuentra en recuperación, estuvieron presentes los principales líderes de la coalición, los sindicatos, movimientos sociales y los intendentes. Con algunos de ellos el Presidente se reunió luego del acto en Olivos, para compartir una cena. "El triunfo no es vencer, sino nunca darse por vencidos", puntualizó.
Los dirigentes mezclados con la militancia
En el escenario había un atril desde el que habló el Presidente y debajo habían ubicado varias filas de sillas para que se puedan sentar los ministros, gobernadores, intendentes, dirigentes sociales y sindicales y otros funcionarios. Sin embargo, poco antes del comienzo del acto, el Presidente ordenó que las levanten: "Quiere hablarle directo al pueblo, a los militantes", detallaron desde su entorno acerca de la decisión.
Mientras terminaron de sacar las últimas sillas que quedaban, ingresaron al espacio que estaba reservado para los funcionarios militantes de Movimiento Evita. Más tarde se sumaron los de Camioneros con sus bombos y banderas. La Cámpora, en cambio, ingresó por Diagonal Norte con el presidente del bloque del FdT en Diputados, Máximo Kirchner, a la cabeza, acompañado por el exdiputado, Héctor Recalde; el presidente del PJ porteño, el senador Mariano Recalde; la titular del Pami, Luana Volnovich; la del ANSES, Fernanda Raverta; el ministro de Desarrollo Social de PBA, Andrés Larroque; la intendenta de Quilmes, Mayra Mendoza y la senadora, Anabel Fernández Sagasti. Ellos no estuvieron al pie del escenario como el resto de los funcionarios, sino con la columna de militantes.
Al pie del escenario estuvieron el titular de la Cámara de Diputados, Sergio Massa; el gobernador bonaerense, Axel Kicillof, todos los ministros del gabinete nacional y el nuevo triunvirato de la CGT. También estuvo el gobernador de Chaco, Jorge Capitanich, y el de Tucumán, Osvaldo Jaldo, el de La Pampa, Sergio Ziliotto y el de Tierra del Fuego, Gustavo Melella, que en la previa del evento se reunieron con el jefe de Gabinete, Juan Manzur, en su despacho. El ministro del Interior, Eduardo de Pedro, estuvo al pie del escenario, pero llegó una vez que ya había comenzado el discurso del Presidente.
De la terraza al presunto periodista
Antes de salir ante la multitud, Fernández subió a la terraza de la Casa Rosada con el canciller, Santiago Cafiero y el secretario general de Presidencia, Julio Vitobello, y hasta el último momento repasó el discurso con Cafiero. Subió al estrado a las 17, tal como estaba planificado. Al finalizar, el mandatario volvió a su despacho con Cafiero, Vitobello y otros ministros y antes de subir las escaleras aseguró a un grupo de periodistas acreditados en Casa Rosada que en la próxima etapa de su gobierno "se viene mucho frentetodismo". También estuvo en la plaza el exsecretario de Prensa y Comunicación, Juan Pablo Biondi, que explicó que estaba allí "como un militante más".
"Nadie nos ha vencido, solo es vencido el que pierde sus ganas de luchar", dijo Fernández ante la multitud, luego de las críticas de la oposición a la convocatoria y agregó que "con mucho dolor he visto cómo se prepararon para que esta semana sea un estallido en Argentina. Todos vimos cómo especularon con el dólar, cómo avisaron que iban a terminar con las indemnizaciones por despidos y hasta soñaron con manotear la presidencia de la Cámara de Diputados", dijo. Además, agregó que "hasta hubo un presunto periodista que se animó a decir que esta semana iba a haber una asamblea legislativa para instituir un nuevo presidente. El Presidente que está acá es el que eligió el pueblo argentino en el 2019", bramó.
Institucionalizar el FdT
En otro fragmento de su discurso el Presidente hizo mención a la necesidad de "institucionalizar" los debates dentro de la alianza gobernante. Eso es algo que venían deslizando distintos funcionarios durante los últimos días: la necesidad de construir una especie de "frente amplio", para ordenar la toma de decisiones. "Además de Presidente de la república soy presidente del PJ, una parte importante del FdT que es el lugar que nos contiene. Si algo hicimos bien es construir ese frente que nos unió y nos dio la capacidad de convocar a nuestro pueblo para que en los momentos difíciles alcen la voz", dijo el Presidente.
Además, agregó que "quiero que el tiempo que se inicia no sea de silencio entre nosotros sino de profundo debate, que discutamos de cara a la gente", puntualizó Fernández. Luego, aclaró que "tienen un Presidente y una Vicepresidenta que quieren trabajar en el mismo sentido. Tenemos que animarnos a llevar adelante ese debate porque sabemos que somos una fuerza diversa, que aunque tenemos comunes denominadores los matices y las diferencias existen. Respetándonos entre nosotros empecemos a ponerlas sobre la mesa para que podamos llegar al 2023 con toda la fuerza que necesitamos".
Un 2023 con primarias
De ese modo hizo referencia a algo que opinan desde algunos sectores del oficialismo, que es que el resultado hubiese sido mejor para el FdT si se dirimían los candidatos en internas. "Mi mayor aspiración es que en 2023 desde el último concejal hasta el Presidente de la República lo elijan primero los compañeros del FdT", lanzó el Presidente.
Sobre este tema, el gobernador Kicillof expresó a Página12 al finalizar el acto que "de camino a lo que será el 23, en lo que yo estoy pensando es en el 22 y en la recuperación económica. Este fue un acto multitudinario en una coyuntura que es difícil porque hace falta una recuperación muy fuerte después de seis años de crisis y Alberto habló de las políticas que el Frente de Todos quiere aplicar, del lugar de la oposición y habló de los desafíos que vienen. Esa es la tarea", dijo antes de ir a Olivos donde junto a intendentes de la primera y tercera sección electoral cenó con el Presidente.