Peritos forenses realizaron este sábado la autopsia al cuerpo de Lucas González, el joven futbolista de las inferiores de Barracas Central que fue asesinado por efectivos de la Policía de la Ciudad el miércoles pasado, y determinaron la causa médica de la muerte.
Las tareas se llevaron a cabo en la Morgue Judicial, ubicada en la sede del Cuerpo Médico Forense, en Junín 762, en el barrio porteño de Balvanera.
La demora se debió a que la familia del joven decidió donar sus órganos, en primera instancia, y luego hubo 48 horas para que las partes designaran sus peritos para supervisar la acción.
La autopsia fue realizada por los doctores Patricia Estela Gómez y Alejandro Félix Rullan Corna, integrantes del Departamento de Tanatología de la Morgue Judicial.
Según señalaron fuentes judiciales a NA, el informe preliminar señala que la muerte de Lucas González se debió a una "lesión por proyectil de arma de fuego en cráneo" que provocó una "hemorragia meningoencefálica". Fuentes de la fiscalía a cargo del caso indicaron a Página/12 que además presenta un surco en el pómulo derecho por el impacto de una segunda bala.
En las próximas horas los restos del joven de 17 años serán entregados a su familia para que puedan proceder al entierro: previamente, se hará la extracción de los órganos, por decisión de los papás de Lucas.
Cómo sigue la investigación
Este sábado, los fiscales que investigan el crimen solicitaron la detención de los tres efectivos que participaron del operativo en el que fue asesinado.
Por otro lado, el ministro de Justicia y Seguridad porteño, Marcelo D´Alessandro, recibió por la mañana al abogado Gregorio Dalbón, quien representa a la familia de Lucas.
El padre del adolescente, Mario González, hizo declaraciones. Confió en que los asesinos "se van a pudrir en la cárcel" y convocó a una marcha este lunes.