Este domingo, los chilenos concurrieron a las urnas para elegir presidente y parlamentarios en los comicios más inciertos en décadas, con candidatos de todo el espectro ideológico. La jornada electoral se desarrolló con “una buena participación” y las largas colas demoraron unos minutos el cierre de los comicios, previsto para las 18.
"Los reportes que tenemos es que ha habido una buena participación", expresó el titular de la Secretaría General de Gobierno de Chile, Jaime Bellolio, tras emitir su voto este mediodía. Asimismo, señaló que el gobierno hizo una campaña para promover la participación en un país donde no es obligatorio concurrir a las urnas. "Se espera que este sea una elección muy participativa con toda la información que se ha entregado", indicó.
Ahora, tras el cierre de los comicios, se procederá al conteo de los votos, que será transmitido por televisión. A priori, los sondeos arrojan que habrá una segunda vuelta entre Gabriel Boric, candidato de la alianza de izquierda Apruebo Dignidad; y José Antonio Kast, del Frente Social Cristiano, de derecha.
Ambos aparecen como favoritos, entre los siete candidatos, para convertirse en el sucesor del presidente, Sebastián Piñera. Si ninguno alcanza el 50 por ciento más uno de los votos necesario para ganar en primera vuelta, todo se definirá en el ballotage, previsto para el domingo 19 de diciembre.
Los otros aspirantes a la Presidencia son la extitular del Senado Yasna Provoste, de la coalición de centroizquierda heredera de la exConcertación; el oficialista y exministro Sebastián Sichel y el varias veces candidato y miembro del Grupo de Puebla Marco Enríquez-Ominami.
Completan la lista el conservador Franco Paris, que no vive en Chile, y el profesor de izquierda Eduardo Artés, por la Unión Patriótica.
Además, en esta elección se definirán 27 de los 43 senadores, 155 diputados y 302 consejeros regionales.
El voto de los candidatos
Los candidatos presidenciales sufragaron en el correr de la mañana. La excepción fue Franco Parisi que no pudo votar por vivir en Estados Unidos y no haber cambiado de domicilio. El candidato del Partido de la Gente tenía previsto volver a Chile unos días antes de la elección para finalizar su campaña, pero contrajo covid-19, y no pudo concretar lo planificado.
Boric, el más joven candidato a presidente de la historia del país, fue uno de los primeros en pasar por las urnas y calificó como un “momento histórico” la votación de este domingo. “Esto no se trata de una persona, se trata de un proyecto colectivo, se trata de que la esperanza le gane al miedo”, dijo el candidato luego de votar en su ciudad natal de Punta Arenas, en el extremo sur del país.
“Espero que la gente entienda que ellos son los protagonistas de esta historia; que seamos capaces de construir un Chile que sea justo, que sea digno, que tenga pensiones dignas para las personas mayores, que tenga un sistema de salud que no discrimine", agregó.
Kast, por su parte, votó en la localidad de Paine, a 50 kilómetros de Santiago, en donde fue abucheado por un grupo de vecinos.
"Lo principal es que mucha gente concurra a votar y se pronuncie en libertad. Hoy debemos guardar nuestras opiniones, porque lo que digamos no cambiará el resultado, la gente ya sabe lo que viene a votar", declaró ante los periodistas.
Más temprano, en el final de un convulsionado mandato marcado por hechos de corrupción y dos años de duras protestas sociales, el conservador Piñera fue la primera figura pública en ir a votar en un colegio en Las Condes, un barrio acomodado de Santiago.
"Todas las opiniones importan. Vengan a votar; somos capaces de resolver nuestras diferencias de manera pacífica, a votar", pidió el mandatario ante las cámaras.
Mayor participación
Las imágenes de los medios de comunicación de Chile muestran que en varios centros de votación se registran largas colas de gente esperando para sufragar. Esto contrasta con lo que paso en las elecciones primarias o de la Convención Constituyente, cuando votó el 43,4 por ciento, menos de la mitad de los habilitados para concurrir a las urnas.
El voto no es obligatorio en Chile desde 2012. Desde ese entonces, la concurrencia a las urnas en elecciones presidenciales se mantuvo entre 42 y 49 por ciento, tanto en primera como en segunda vuelta, en 2013 y 2017.