El histórico proyecto de ley que contempla legalizar el matrimonio entre personas del mismo sexo en Chile dio este martes un paso más al ser aprobado en la Cámara Baja y espera ahora su última votación en el Senado, anuncio que fue celebrado por la comunidad LGBTI del país.
En una sesión que terminó con aplausos, la iniciativa, que también permite la adopción y la filiación, se aprobó por amplía mayoría: 101 votos a favor, 30 en contra y 2 abstenciones.
El proyecto, que debe volver al Senado, es una de las mayores reivindicaciones de los colectivos LGTBI en Chile, donde las personas homosexuales solo pueden unirse bajo la figura del Acuerdo de Unión Civil (AUC), que no reconoce derechos filiativos.
De aprobarse, Chile se convertiría en el octavo país de América latina en legalizarlo después de Argentina, Brasil, Colombia, Uruguay, Ecuador, Costa Rica y varios estados de México.
"El matrimonio igualitario es la protección de la familia, una cuestión urgente y que constituye una luz de esperanza para el país", expresó Isabel Amor, directora de la Fundación Iguales, una de las plataformas LGTBI más activas del país.
En un giro sorpresivo, el pasado julio el actual presidente, el derechista Sebastián Piñera, señaló que había "llegado el tiempo" de aprobar la iniciativa e instruyó al Parlamento que lo debatiera con urgencia.
El proyecto se había presentado en 2017 gracias al impulso de la expresidenta socialista Michelle Bachelet (2014-2018) pero estuvo estancado durante casi cuatro años.
En los últimos meses, la norma, que sufrió modificaciones en ambas cámaras, ahora necesita la aprobación definitiva del Senado.
"Creemos en la dignidad de los distintos tipos de familia, la ley tiene que favorecer que el amor pueda desarrollarse entre todo tipo de parejas", afirmó el diputado democratacristiano Matías Walker.
La legisladora oficialista Ximena Ossandón lamentó, sin embargo, que Piñera hubiera urgido la discusión de esta iniciativa, una postura que comparte con los sectores más conservadores del oficialismo. "No es lo mismo una relación entre dos hombres que una heterosexual, aunque la ley lo diga (...) La misma naturaleza pone sus barreras", sostuvo.
El impacto de las elecciones presidenciales
El triunfo del candidato presidencial ultraderechista José Antonio Kast, un católico que se opone al matrimonio igualitario y que obtuvo el 27,9 por ciento de los votos en la primera vuelta el pasado domingo, aceleró la discusión del postergado proyecto.
"Este proyecto no es de izquierda o derecha (...) Es importante verlo ahora porque Chile va a decidir entre democracia o autoritarismo", consideró el diputado Félix González, del Partido Ecologista Verde.
Kast, quien ha afirmado en sendas ocasiones que existe un "lobby gay que busca influir a las personas", fue el candidato más votado y se enfrentará en el balotaje del 19 de diciembre al izquierdista Gabriel Boric.
"Frente a los discursos de violencia y odio, hace falta responder con amor. No queremos sesgos dogmáticos ultra ideologizados", advirtió el diputado Diego Ibáñez, del Frente Amplio, la coalición que lidera Boric.