Después de meses de negociaciones, todo está listo para el desembarco de Jorge Macri en la Ciudad de Buenos Aires. En un frugal cambio de gabinete post electoral, el intendente de Vicente López pasará a ocupar la conducción del Ministerio de Gobierno porteño, un cargo que le permitirá funcionar como intermediario entre Horacio Rodríguez Larreta y los intendentes del conurbano. La mudanza, que formó parte del acuerdo con el jefe de gobierno porteño para allanarle el camino a Diego Santilli en la interna bonaerense, abre un nuevo interrogante en la disputa por la sucesión de la Jefatura de la Ciudad, que ya tiene varios nombres en juego. Macri sostiene que su ambición es ser gobernador de la Provincia de Buenos Aires, pero, de momento, se prepara para arribar al gabinete de CABA. El objetivo es que su llegada permita aceitar la relación con el AMBA y le aporte un mayor "volumen político" a la gestión. Larreta, por otro lado, se asegura con esta incorporación una terminal en la Provincia de Buenos Aires y avanza así en su armado presidencial de cara al 2023.
Tras diez años como intendente de Vicente López, Jorge Macri cruzará la General Paz y ocupará el puesto de ministro de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires. El traslado al gabinete porteño, que se terminará de formalizar esta semana, forma parte del pacto que Macri había sellado con Rodríguez Larreta en julio para resignar su ambición de encabezar la lista de candidatos a diputados por la Provincia, y terminó de rubricarse en los últimos días, en una reunión secreta entre ambos dirigentes. "Estamos hablando con Horacio para ver si podemos resolver temas que son comunes a los porteños y los bonaerenses con una mirada distinta. Es muy antiguo pensar que todo es de una sola mano, la gente vive y labura de un lado del otro y tiene problemas que son comunes. A mí me apasiona gestionar, si en lugar de impactar a 300 mil habitantes puedo hacerlo en millones de personas, ¿por qué me negaría?", declaró tras el encuentro con Larreta.
Al margen de "pagar" el gesto de Macri en favor de la candidatura de Santilli, el objetivo explicitado del nombramiento es que el intendente bonaerense (en licencia) pueda imprimirle a la Ciudad "una relación más aceitada con los otros distritos del AMBA". Originalmente, se había pensado crear un ministerio nuevo con este fin pero, en un contexto ya de por sí delicado por los aumentos que propone el Presupuesto 2022, en el gobierno porteño temían las críticas que pudieran surgir frente a la decisión de agrandar el gabinete. Finalmente, se terminó acordando que ocuparía el lugar que actualmente ocupa Bruno Screnci, un hombre cercano a Diego Santilli que, por lo que pudo saber este diario, no tenía conocimiento previo de que sería reemplazado. "La idea es que Jorge le imprima un rol mucho más político al Ministerio, que tenga una relación más directa con los intendentes y que funcione como una especie de armador de Horacio en el territorio. Le va a dar mayor volumen político al gabinete", dijo un vocero del PRO que tiene terminal tanto en Uspallata como en la Provincia de Buenos Aires.
Con esta mudanza, el jefe de gobierno porteño, que quedó muy solo después de que su mano derecha migrara hacia la Cámara de Diputados, se asegura un aliado --o "vocero", como aseguran algunos-- con mayor peso político que le permita potenciar su estructura nacional. Los ojos de Larreta están puestos en la Casa Rosada y la incorporación de Macri forma parte del armado político que está construyendo de cara al 2023.
Al primo del ex presidente, por otro lado, el traspaso le cierra por muchos lados. Irónicamente, tras haber criticado largo y tendido a Larreta por querer imponer un candidato porteño en la Provincia, su salida de la intendencia le permite volver a presentarse en 2023 (más allá de las negociaciones para modificar la ley que prohíbe las reelecciones indefinidas en las intendencias). Macri, sin embargo, niega que vaya a ir por un nuevo período y sostiene que, terminado su turno, será el momento de la concejala Soledad Martínez. Martínez, en efecto, es quien ahora lo reemplazará en la intendencia de Vicente López.
"Jorge quiere ser gobernador de la Provincia de Buenos Aires", afirman, tajantes, desde el entorno de Macri. La competencia estará reñida, ya que son varios los nombres dentro de Juntos por el Cambio que aspiran a ocupar ese lugar, como Cristian Ritondo y Santilli. El desembarco en la Ciudad, sin embargo, abre una nueva puerta: la jefatura porteña. Si bien los colaboradores de Macri niegan que esté analizando instalarse definitivamente en la Ciudad, son varias las figuras del PRO que especulan con que su llegada sumará una pata más a la ya tumultuosa interna porteña. ¿A quiénes podría competirle? A María Eugenia Vidal, Martín Lousteau, Patricia Bullrich, entre otros.
En la mesa de Lousteau, quien cerró su propio acuerdo con Larreta para competir en 2023, están tranquilos. "No nos preocupa. Si termina queriendo ser candidato acá veremos, pero en principio es un tema del PRO", desestimó un colaborador cercano del senador radical. En el caso de la ex "orgullosamente bonaerense" plantean que Vidal "está pensando en recorrer el país. Su deseo es ser presidenta, por lo que lo de Jorge sería irrelevante, pero aún no hay ninguna certeza sobre lo que pueda pasar en 2023", sostuvo un colaborador cercano que, irónico, agregó: "Ahora, no tengo duda de que Jorge quiera ser candidato en la Ciudad, que es el único distrito en el que el apellido Macri puede jugar a favor".